EL CORREO 02/05/14
· Iñaki Domínguez, que será juzgado hoy en París, y Xabier Aranburu formaron una célula de compra de dispostivos electrónicos en Génova y Livorno.
ETA importó desde Italia a Francia decenas de componentes electrónicos para la fabricación de artefactos explosivos, entre ellos bombas-lapa, solo cuatro meses antes de anunciar el cese definitivo de la actividad armada. Los activistas Iñaki Domínguez Atxalandabaso y Xabier Aranburu Sagarminaga formaron una célula de la logística militar implantada en las ciudades de Génova y Livorno que se encargó en 2011 de la compra de material por correspondencia, según investigaciones de los servicios antiterroristas franceses.
El Tribunal Correccional de París va a juzgar hoy a Iñaki Domínguez (Gernika, 1975) por la causa abierta a raíz de su detención el 16 de junio de 2011 a bordo del tren Turín-Chambery en la estación fronteriza de Modane (Saboya). Los agentes que controlaban la identidad de los pasajeros se percataron de la falsedad del carné español a nombre de un ciudadano de Torrelavega que les presentó y lo detuvieron en posesión de un billete de la compañía ferroviaria Trenitalia que había adquirido la víspera en la estación turinesa.
Además de 2.175 euros y 520 dólares en metálico, Domínguez transportaba en el equipaje abundante y variado material electrónico idóneo para la confección de los sistemas de activación de decenas de bombas.
Había 46 temporizadores de 60 minutos, otros 30 de media hora, 21 detectores de impacto y varios de variación de luz, así como sensores de mercurio, tres montajes de emisión-recepción a distancia, seis antenas y tres lámparas de neón.
También llevaba centenares de circuitos integrados, diodos, resistencias, interruptores, conectores, potenciómetros y células fotoeléctricas, entre otros dispositivos extremadamente elaborados según los peritos franceses. Completaban el alijo tres pares de tapones de oídos y un casco de protección como los usados por los manipuladores de explosivos.
Catorce huellas
En los embalajes fueron identificadas catorce huellas de Xabier Aranburu (Bilbao, 1979), detenido un año después en Las Landas en posesión de material similar y de cinco documentos de identidad italianos. Las pesquisas policiales corroboraron los vínculos operativos mantenidos por los dos activistas entre Francia y las bases en Génova y Livorno, donde se constató la adquisición de dispositivos como inhibidores de ondas electrónicas.
Domínguez Atxalandabaso tiene concedida por la Justicia francesa una euroorden española emitida en marzo de 2010 por el juez de la Audiencia Nacional Eloy Velasco. En ella se le acusa de haber sido a mediados de los años 2000 uno de los enlaces entre ETA y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) para realizar cursos conjuntos en la selva venezolana y preparar atentados en Madrid contra autoridades colombianas, entre ellas los expresidentes Álvaro Uribe y Andrés Pastrana.
EL CORREO 02/05/14