ABC, 2/10/11
En una primera fase deberían ser excarcelados precisamente aquellos reclusos que llevan ya en prisión más de 20 años
El plan preparado por ETA para negociar con el Gobierno las «consecuencias del conflicto» prevé que, una vez conseguido el «Acuerdo Político», el último preso abandone la cárcel en un plazo no superior a los cinco años.
Según las pretensiones de la banda terrorista, en una primera fase deberían ser excarcelados precisamente aquellos reclusos que llevan ya en prisión más de 20 años. En principio se trataría de los más sanguinarios. Por ello ETA tiene tanto interés en que se liquide la «doctrina Parot» que pondría ya en la calle a unos 60 pistoleros, como Domingo Troitiño, «Kubati» o «Carnicerito de Mondragón»… En una segunda fase, deberían abandonar la cárcel los que llevan en ella entre 15 y 20 años. Y los restantes recuperarían la libertad a lo largo de los próximos años, de una manera escalonada. ETA asume que hoy en día no es posible una amnistía general como la que hubo en 1977.
Pero antes de entrar en la pretendida negociación la banda exige otra serie de reivindicaciones. Por ejemplo, la excarcelación de quienes han cumplido las tres cuartas partes de su condena, de aquellos que padecen enfermedad, aunque no sea grave, y de quienes han sido condenados o están procesados en los macrojuicios contra Batasuna y otras tramas civiles.
Tampoco acepta que los presos que queden en libertad lleven la pulsera telemática o que se les prohíba residir en la ciudad en la que cometieron los atentados. Se muestra también contraria a que salgan antes los presos que han criticado el terrorismo.
ABC, 2/10/11