LIBERTAD DIGITAL – 31/12/15 – IÑAKI ARTETA
· El documental Ventanas al interior trata sobre la vida de unos presos, sus historias, como hay tantos y tantas, lo que pasa es que son presos de aquí. La soledad, la incomprensión, la impotencia, el miedo a la tortura, sus sueños, la sensación de deber cumplido, David contra Goliat,…
A ver, ¿qué hay de malo en ello? Son historias de personas normales en una situación extrema e injusta: están en la cárcel por una lucha política.
Es una película que está muy bien. Tiene planos muy bonitos y un estilo sosegado, apacible. Invita a la reflexión.
«El documental dirigido por Josu Martínez, Eneko Olasagasti, Mireia Gabilondo, Enara Goikoetxea y Txaber Larreategi aborda el mundo de los presos y presas vascas en cinco historias independientes»,
dice la web de ETB. Además lo han hecho entre 5 directores vascos y algunos tienen su currículum (vasco). ¿Se podrían reunir 5 directores vascos para realizar una película a favor de las víctimas inocentes de los terroristas?
Su intención es «mostrar desde un punto de vista humano una realidad social muchas veces retorcida y distorsionada por los medios oficiales: La realidad humana de los presos vascos»,explican sus realizadores.
Trata de personas que son como tú o como yo, jóvenes y mayores que hicieron un enorme sacrificio por los demás, por mejorar la sociedad en la que vivían, arriesgando su vida por unos ideales. Mientras tú y yo vivíamos tranquilos ellos luchaban por nuestros derechos colectivos. Han pasado años escondidos, perseguidos, cuando no torturados, encarcelados arbitrariamente o asesinados y ahora, ¿les vamos a dar la espalda? Mientras todos aquí vivíamos cada vez un poquito mejor llenando la maleta de competencias y gozando del autogobierno ellos lo dejaron todo por la lucha. Hasta morían. ¿Quién crees que han conseguido lo que tenemos? Todos sabemos como han sido las cosas pero por si acaso, debemos repetirlo y contarlo a las futuras generaciones: el genocidio contra los vascos tuvo sus valientes opositores.
Son gente normal, con su familia que sufre por ellos, con sus opiniones políticas y sus pensamientos de poeta, pero les falta la libertad. Sólo la venganza de los españoles, siempre torturadores y represivos, los mantiene en clausura ahora que hay paz. Ellos nos trajeron esa paz. Lucharon durante largos años haciendo cosas que no querían pero un buen día nos trajeron la tan nombrada paz, de manera unilateral. Y ahora se les paga así. Ahora que no practican su lucha armada, que han apostado por la política ¿qué se consigue reteniéndoles en esas condiciones? Ahora que aquello pasó ¿a qué viene mirar hacia atrás con esa saña? Se hicieron cosas mal, de acuerdo, pero, ¿qué me dices de la guerra civil? ¿Del bombardeo de Gernika? ¿Y de las torturas?
ETB no quiso emitir mi último documental 1980, un repaso sobre las consecuencias del año en el que la agresividad de ETA fue más efectiva. A la directora, Maite Iturbe, no le pareció nada raro. Dijo en sede parlamentaria que no lo había visto, pero que le habían comentado que tenía un planteamiento «sesgado». Los españoles tocando las pelotas: hagas lo que hagas van a protestar. Aguantas unos días el chaparrón y ya está. Pasará. Así vamos haciendo desde siempre. Hacemos lo que tenemos que hacer, no nos van a decir los españoles lo que tenemos que poner en nuestra tele. Ellos que hablen, nosotros hacemos. Somos un país en marcha. Un día en la tele pública, continuamente en las escuelas, en la universidad, en la formación de los próximos maestros y profesores, en la prensa, en los libros y en los bares. Poco a poco, paso a paso, gota a gota. «Un conflicto, dos bandos», ese es el mensaje.
Es muy recomendable ver ese documental, en serio.
Así y no de otra forma se hace la historia. Así y no de otra forma se construye eso a lo que muchos dan vueltas en la boca: la Memoria.