Los independentistas siguen sin obtener el apoyo internacional que prometieron en la última campaña. El director de la Representación de la Comisión Europea (CE) en Barcelona, Ferrán Tarradellas, aseguró ayer que no puede pronunciarse sobre el referéndum de independencia que quiere organizar la Generalitat en 2017, aunque añadió que siguen con «mucha atención» lo que pasa en Cataluña.
«No es una competencia de la Unión Europea. Sería muy irrespetuoso emitir opiniones, meter las narices en un tema en el que se nos ha dicho específicamente que no las metamos», expuso en una comparecencia en la comisión de Acción Exterior del Parlament.
Tarradellas pidió que no se interprete el silencio de la Comisión como indiferencia: «Cualquier cosa que pasa y especialmente de esta importancia la seguimos con mucha atención». Y, tras recordar que no se inmiscuye en cuestiones internas de los Estados miembros, garantizó que «la CE abre mucho los ojos, escucha mucho, pero no habla demasiado».
Tarradellas explicó que el presidente de la CE, Jean-Claude Juncker, quiere tener «todos los puntos de vista» sobre la realidad catalana y estar informado. Pero a los diputados independentistas no les bastó, y Jordi Sendra, representante de Junts pel Sí en la comisión, le replicó que Europa en algún momento tendrá que tomar cartas en el asunto, sobre todo cuando el Estado quiera «encarcelar» a políticos que han protagonizado el proceso soberanista.
El diputado de la CUP, Carles Riera, pidió a la Comisión que no sólo preste atención a la legalidad, sino también a la legitimidad de aquellos catalanes que quieren la independencia, informa Europa Press.
El diputado del PP, Juan Milián, afeó a los soberanistas que busquen fragmentar la UE cuando es más necesaria que nunca la «unión», mientras que Susana Beltrán (C’s) defendió que el procés va en contra de lo que se recoge en los tratados europeos.
Desde Menorca, un viejo protagonista de la política catalana se unió ayer al Govern para pedir a las instituciones europeas que «intercedan» por Cataluña. El ex vicepresidente de la Generalitat y ex líder de ERC, Josep Lluís Carod-Rovira, que presentaba en la isla su último libro, dijo que Europa debería intervenir cuando llegue el momento de celebrar el referéndum de independencia previsto para 2017.
«El actual Gobierno de la Generalitat, tras dos años de un rumbo errático, se ha centrado en el referéndum, el único camino que se entiende internacionalmente y propio de una sociedad democrática que quiere resolver sus conflictos de manera pacífica», aseguró Carod-Rovira, que está retirado de la primera línea política.