Miquel Giménez-Vozpópuli

Por si nos quedaba alguna vergüenza que pasar, un grupo del Parlamento Europeo se reunirá este jueves a ver si la cosa democrática funciona o no en nuestro país. Se conoce que el grupo que vigila la cosa del estado de derecho y tal intuye que en España las cosas no rulan como deberían. La ley de amnistía ha hecho saltar todas las alarmas en la UE, provocando que esa Europa, de habitual sesteadora y apática que suele dormir la siesta bajo la cálida manta de “Eso son asuntos internos”, se haya despertado cual legionario al escuchar el toque de diana. Añadan a eso el ímprobo trabajo similar al de Sísifo que tiene el Comisario de Justicia Didier Reynders con el asunto del desbloqueo del Consejo General del Poder Judicial, el hecho que este comité ya citase a Pilar Llop en el 2022, la por entonces ministra de justicia, para que se presentara ante el mismo y la señora alegó bautizo y no fue y que Bolaños, al que le tocaría ir ahora, no haya confirmado si irá o no irá. Normal.

¿Se imagina la cara de esos doctos y sesudos integrantes del grupo que quieren saber qué carallo pasa en España cuando Bolaños o quien sea les diga que la ley de amnistía la están redactando los mismos que han de beneficiarse de ella?

El chaval no ha estudiado y debe pensar que en no yendo, no meterá la pata. Y hace bien, porque se conoce que el temario del examen es tremebundo porque salen cosas como la separación de poderes, la obligación del gobernante de no inmiscuirse ni mucho menos presionar al poder judicial y cosas así.

Se conoce que la sesión del jueves será a puerta cerrada. Está bien, máxime si Bolaños al final decide ir porque a la que le pregunten algo que no le acomode ése coge la puerta y se va, y ya me dirán que hacen en esa reunión sin puerta. ¿Se imagina la cara de esos doctos y sesudos integrantes del grupo que quieren saber qué carallo pasa en España cuando Bolaños o quien sea les diga que la ley de amnistía la están redactando los mismos que han de beneficiarse de ella? Oh la la, dirán los franceses. ¿Se imaginan a Al Capone, Lucky Luciano o El Mula escribiendo la ley que les juzgó? Scheisse, dirán los germánicos. Estaría bien recordarle al gobierno de España, que tantos jueces y letrados tiene en su seno, vulgo teta, una vieja máxima en Derecho: Nemo esse iudex in sua causa Potest, nadie puede ser juez en propia causa.

Porque el planteamiento del monclovita es que si mejoran resultados o ganan, que sería la leche, y consiguen formar gobierno con el BNG arrebatándole la Xunta al PP, podría dar por buena su ley de amnistía diciendo que no ha debilitado al PSOE

Claro está que todo esto a Sánchez se la trae al pairo porque bastante tiene el hombre con pasarse el día enredando para ganar en Galicia. De hecho, y para conseguirlo, tiene a Mariyoli Farmatin negociando con Podemos sus espectaculares logros sociales. Así la chiquilla está entretenida, se quema ella solita con sus ex aliades y no mete las narices, con perdón, en una campaña en la que Sánchez se juega mucho más de lo que piensan algunos. Porque el planteamiento del monclovita es que si mejoran resultados o ganan, que sería la leche, y consiguen formar gobierno con el BNG arrebatándole la Xunta al PP, podría dar por buena su ley de amnistía diciendo que no ha debilitado al PSOE, lo ha fortalecido.

Por eso lo que suceda este jueves en las Europas a Sánchez le importa una higa. ¿Qué dicen que en España no se respetan las más elementales normas de un estado de derecho democrático, occidental y moderno? Qué más da, eso será porque son de la fachoesfera. ¿Qué llaman a capítulo al gobierno por sus tejemanejes con los órganos judiciales? Se dice que el PP ha movido sus tentáculos hasta Bruselas y que el grupo está compuesto por peligrosísimos derechistas. ¿Qué es una vergüenza como nación que tengan que venir de fuera a comprobar si vivimos en un estado donde el imperio de la ley funciona? No importa, porque en materia de vergüenza este gobierno hace mucho tiempo que prescindió de tal cosa, si es que alguna vez la tuvo. Y así todo.