Félix y el consenso historiográfico

Félix Bolaños, la gran esperanza blanca Pedro Sánchez, ha hecho una gran revelación: nos ha descubierto que hay un consenso historiográfico según el cual la inercia de la dictadura duró hasta 1982. Tuvo acuse de recibo y se enmendó parcialmente al reconocer que una Ley Orgánica no puede ser corregida por una ordinaria, como la Ley de Memoria Democrática. Las leyes orgánicas son la Constitución y la amnistía.

La estupidez la completó el jefe supremo al anunciar que va a reconocer como víctimas de la transición a etarras muertos en enfrentamientos policiales. Pongamos un ejemplo práctico: Hubo un día en el que no quedó ni un terrorista en las cárceles españolas. El último, Fran Aldanondo Badiola, fue excarcelado en diciembre del 1977. Murió 22 meses después, en octubre de 1979 en un enfrentamiento con la Guardia Civil. Una víctima de la transición para Pedro Sánchez.

Si relacionamos la estupidez de Sánchez con la de Bolaños hay alguna perplejidad más. Después de 1982 hay un total de 27 asesinatos de militantes de ETA por los GAL, cuatro de ellos en 1983: Lasa, Zabala, Kattu y Txapela. ¿Los considerará Pedro Sánchez víctimas de la Transición?¿Creerá Bolaños que murieron por la inercia de la dictadura?¿Y los 370 asesinatos de ETA  sin resolver, más inercia de la dictadura, otras víctimas de la Transición? Estamos gobernados por gentuza.

Leguina:  En la Transición se alcanza un acuerdo que es la reconciliación nacional, que representa dos leyes fundamentales. Una es la de la Ley de Amnistía y la otra es la Constitución propiamente dicha. Déjenlo. ¡Saquen ustedes a los que estén mal enterrados para que sus familias los puedan enterrar decentemente y déjense ya de esta mierda, coño!

Paco González hace un resumen de la acciónde Gobierno: Legislan para que los niños tengan peor educación, para que los policías estén más maniatados, para que los empresarios tengan más complicado contratar, para que  los delincuentes encarcelados salgan antes, para los vagos y maleantes. Gobiernan para los peores  y contra los mejores”.

Mónica Oltra compara el uso del hiyab con otras “opresiones patriarcales” como “ir maquilladas o llevar tacones”, O visitar a las adolescentes dormidas como hacía su marido.

La subdirectora de seguridad de la cárcel de Villena (Alicante) que denunció a principios de septiembre que varios encapuchados le habían golpeado a la salida de su casa y amenazado con que tuviera la «boca cerrada». Resultó que era ella misma quien se enviaba los mensajes amenazantes.

Fernando Grande-Marlaska, también mostró su respaldo a esta trabajadora, a la que definió como «una verdadera funcionaria». Una pifia más que sumar a las agresiones a Ciudadanos en la manifestación del Orgullo, a su condena del hombre de Valladolid que trataba de evitar que su mujer se arrojase por la ventana y él lo acusó de violencia de género, a la falsa denuncia del tipo que dijo haber sido tatuado en la nalga con la palabra maricón. Y todo en este plan.

Pablo Montesinos, pobre, sugiere a Álvarez de Toledo que deje el escaño si ha perdido las ganas. Parece más bien que lo que ha perdido Cayetana es la fe. En ellíder, quiero decir porque las ideas que defiende parecen las mismas.

Añadía algo más nuestro buen Montesinos:  dice que él en lugar de Cayetana, daría un «paso atrás» y dejaría el escaño. ¡Él en lugar de Cayetana! Con perdón por la expresión, pero es que la misma comparanza jode.

Gulliver y su ovillejo:

¿Quien montó nueva quedada?
¡Ada!
¿Quien se apuntó a la parranda?
¡Yolanda!
¿Qué podemita irá allí?

¡Lilí!Si la Colau ahora a ti,
te invita, Irene, a su “plan”,
superdrástica di sí,
te molará porque van
Ada, Yolanda y Lilí.