EL PAÍS, 18 /9/11
BBK y Vital aprueban la integración con porcentajes de apoyo superiores al 90%
A Kutxabank ya solo le falta una asamblea general, la de Kutxa el próximo viernes, para ser una realidad. A la cuenta atrás oficiosa que comenzó allá por junio con los acuerdos financieros y hace 48 horas el social, le queda ya solo una semana. Las asambleas generales de BBK y Vital aprobaron ayer la fusión de las tres cajas vascas por una abrumadora mayoría impensable sólo hace cinco meses, -92 de los 100 asamblearios de la BBK y 90 de los 95 asistentes en la de la Vital, en ambos casos por encima del 90%- cuando, curiosamente el mapa político institucional era mucho más sencillo.
Precisamente por esa razón el presidente de la BBK, Mario Fernández calificó ayer de «histórico» el día, y quiso reconocérselo a todos los partidos en general, pero al último en incorporarse al acuerdo, a Bildu, de manera especial. En una declaración que no quiso obviar, agradeció a la coalición independentista que dirige la izquierda abertzale e incluye a EA y Alternatiba «el ejercicio de responsabilidad de país» que le ha llevado a dar su apoyo al proyecto.
A renglón seguido reconoció que la aportación de Bildu es prácticamente testimonial y con más efecto simbólico que real. Bildu «ha planteado cuestiones legítimas y apropiadas, que no distorsionan el Proyecto de Integración pero que contribuyen positivamente al mismo». La principal aportación más allá de los cambios de redacción en algunos aspectos de la Obra Social es que «el banco se compromete a aceptar la decisión de los trabajadores sobre el ámbito de negociación» colectiva. Las cajas deberán celebrar nuevas asambleas en octubre para aprobar lo acordado con Bildu.
La coalición, ELA y LAB han defendido la necesidad de un referéndum para todos los trabajadores que dé luz verde al pacto laboral, incluida Navarra.
El viernes, sin embargo, el 65% de la representación sindical, formada por CC OO, Pixkanaka y Grupo Vital, selló el pacto que garantiza la paz social en todo el proceso hasta su conclusión en enero de 2014. Se desmarcaron de ese pacto ELA y LAB, como también hicieron ayer sus representantes en las asambleas de BBK y Vital.
Tratándose de una fusión en la que el presidente de la BBK ha tomado las riendas del proceso, no podía olvidarse de los demás «partidos políticos» por sacar del debate público este asunto, por vez primera desde 2005, pese a «la coincidencia con períodos electorales». Fernández, casi en el único momento en el que abandonó un discurso de carácter más técnico, resaltó que, al menos esta vez «han entendido que este es un proyecto de país» y que había que hacer los esfuerzos necesarios «para que naciera con el máximo consenso social». Al final, el presidente de BBK, con la ayuda plena del presidente de la Vital, Carlos Zapatero, y en un segundo estadio, ya con la participación del de Kutxa, Xabier Iturbe, lo han conseguido.
Zapatero, por su parte, desveló ayer que el futuro Banco podría casi triplicar sus resultados en sólo cinco años y pasar de los 380 millones de euros de 2010 a los 846 en 2015. Si así fuera, la dotación de las Obras Sociales podría incrementarse desde los 105 millones del pasado ejercicio, a los 245 millones en 2015. «De producirse estas previsiones, Álava lograría en sólo cinco años los mejores resultados de su historia», dijo Zapatero a los miembros de su asamblea.
La integración coloca a Kutxabank como la cuarta caja por activos totales con 75.729 millones de euros -la quinta cuando culmine la operación Unicaja-CajaEspaña-Caja Duero-, y la octava entidad del sistema financiero español. Contará con más de 1.300 oficinas, una plantilla de más de 9.000 personas, y se ha fijado como objetivo tener un capital principal en 2015 cercano al 16%.
El Consejo de Administración de Kutxabank estará integrado por 20 miembros de los cuales 12 (el 60%) serán designados a propuesta de BBK, entre ellos el presidente ejecutivo, 6 consejeros, entre ellos el vicepresidente primero serán a propuesta de la guipuzcoana Kutxa, y los dos restantes con un vicepresidente segundo a propuesta de la Vital. La sede del banco se fija en Bilbao.
EL PAÍS, 18 /9/11