ABC 24/10/15
El ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, inauguró ayer en Pamplona la exposición «La Victoria de la Libertad: la Policía Nacional contra el terrorismo». Se trata de un homenaje a los 186 policías nacionales asesinados y sale adelante pese a los reiterados intentos de Bildu de boicotearlo. De hecho, ningún intregrante del Gobierno foral, presidido por Uxue Barkos, acudió al acto.
A través de varios paneles con información escrita y visual, la exposición muestra las diferentes secuelas y consecuencias que la barbarie terrorista ha dejado en las víctimas y sus familiares. Permanecerá abierta hasta el 1 de noviembre.
En su intervención, el titular de Interior dijo que «la libertad ha ganado y ha vencido al terror tras sufrir mucho durante los años de plomo». Una paz y una convivencia conseguida, no por una decisión voluntaria de ETA de dejar de matar, sino porque «los terroristas han sido vencidos, y por tanto ha habido vencedores». «Y no hablamos en términos de venganza –añadió–, sino de una realidad constatable ya que si los terroristas son los vencidos, la sociedad, los ciudadanos y especialmente las víctimas, son los vencedores». Además, dejó claro que «el homenaje, recuerdo y gratitud a las víctimas va a ser permanente, pese a quien le pese».
Fernández Díaz subrayó que «los pamploneses y los navarros quieren a su Policía, Policía Nacional, Policía Foral y a su Guardia Civil. La exposición, que ya ha visitado otras 11 ciudades, «seguirá recorriendo España para dar a conocer la dedicación y el heroico sacrificio realizado por la Policía Nacional».
Mientras, un grupo de simpatizantes de la «izquierda abertzale» pidió ayer amparo al Defensor del Pueblo en esa Comunidad, Javier Enériz, al considerar que la exposición supone una «burla» a las supuestas víctima de abusos policiales. Entre ellos figuraban una hermana del etarra Mikel Kastillo.
Además, ayer la Justicia española pidió por cuarta vez a Reino Unido la entrega del histórico etarra Antonio Troitiño, fugado en Londres. El juez José de la Mata cursó una orden europea de detención y entrega contra el terrorista, reclamado por reintegrarse en ETA cuando salió de prisión en 2011. El magistrado explica a las autoridades británicas, que se niegan incluso a que declare por videoconferencia, que el proceso no puede continuar si el etarra no comparece.