Francia cierra la puerta al diálogo con ETA y a medidas excepcionales con los presos

DIARIO VASCO, 3/10/11

Los ministros de Interior galo y español se reúnen por vez primera tras el fin de la violencia. El Gobierno francés teme que «soldados perdidos» protagonicen una escisión en ETA

Ni diálogo, ni leyes de excepción penitenciaria ni modificaciones en el marco jurídico-político. Pero sí mucha cautela ante una posible escisión por parte de los «soldados perdidos» y la existencia de arsenales clandestinos en su territorio. El Gobierno francés explicitó ayer su posición oficial ante el anuncio de cese definitivo de la actividad armada por parte de ETA para dejar claro que no piensa realizar gestos de distensión ni mover ficha en el tablero político.

LAS CLAVES
PRECAUCIÓN
«Continuamos vigilantes. Hay armas en circulación», advierte el ministro Guéant
EL DATO
La apertura de un nuevo penal en Las Landas facilitaría el acercamiento de presos de ETA

El mensaje fue formulado por Claude Guéant, ministro del Interior y exsecretario general en el Elíseo del presidente, Nicolas Sarkozy, de quien ha sido principal asesor y estratega en materia de lucha contra ETA. Al término de una reunión con su homólogo español, Antonio Camacho, a la que asistieron mandos de los servicios secretos galos, el anfitrión evitó toda euforia y prefirió enfatizar la consigna de que «a nivel operativo hay que seguir con mucha cautela».

«Continuamos vigilantes. Hay todavía armas en circulación», advirtió en consonancia con los análisis del antiterrorismo francés sobre un riesgo de cisma a cargo de un núcleo duro de irreductibles. «Puede que, como ha sucedido en muchos finales de otros conflictos terroristas, sigan por ahí soldados perdidos de una causa que, sin embargo, está ya perdida», formuló Guéant. «Seguiremos al acecho de estas personas. Los perseguiremos con el mismo rigor que hoy, porque de ello depende la victoria de la democracia», apostilló en una declaración reveladora de que el inmovilismo de París en la cuestión vasca no afecta al ámbito policial.

En un nítido desmarque de la posición española en un pasado no tan remoto, Guéant recordó que «Francia nunca ha dialogado con ETA». Era una forma de decir que París mantiene su ventanilla cerrada al emplazamiento de abrir un proceso de diálogo directo para abordar las consecuencias del conflicto planteado por tres encapuchados el 20 de octubre.

No al departamento vasco

Tampoco existe ninguna predisposición a un reconocimiento institucional de la especificidad del País Vasco francés, territorio que comparte con el Beárn el departamento de Pirineos Atlánticos. Dicho con palabras de Guéant: «Nuestra organización democrática y territorial permite la expresión de todas las sensibilidades políticas y culturales».

Más ambiguo se mostró el ministro del Interior al tratar la cuestión penitenciaria, materia que es competencia de su colega de Justicia. «Las personas de ETA actualmente en nuestras prisiones, sea a título preventivo o por una condena, están por hechos precisos y en el marco de un proceso judicial», dijo en alusión a una colonia de 137 presos.

«No hay razón para que la Justicia no se aplique», insistió. «La Justicia es un elemento fundamental de la democracia y debe seguir aplicándose», recalcó antes de negar la existencia de motivos para promulgar alguna «ley de excepción». Pero, a diferencia de España, donde la amnistía no es constitucional, en Francia los indultos generales forman parte de las prerrogativas del jefe del Estado. Por otro lado, como demuestra la experiencia de Córcega, los acercamientos de presos a sus domicilios son viables y, en el caso vasco, estarían facilitados por la apertura de un nuevo penal en Las Landas.

Por su parte, Antonio Camacho expresó a su colega el «agradecimiento de España, que sin duda será eterno», por un «trabajo esencial» en el «triunfo de la democracia» y la «derrota de la banda». «Una de las principales cuestiones que hemos abordado es la de continuar trabajando con la misma intensidad, con el mismo grado de colaboración y mantener el trabajo conjunto en la lucha antiterrorista. Así nos lo impone la Ley y la prudencia», sostuvo.

El ministro del Interior tuvo un «recuerdo especialmente sentido» para la familia del brigadier-jefe Jean-Serge Nérin, muerto a tiros en marzo de 2010 a las afueras de París y última víctima en el historial criminal de ETA. Dijo no tener «ninguna ratificación en este momento» de que ETA vaya a pedir perdón a las víctimas, algo que, a su juicio, sería un «gesto importante y necesario para poder seguir construyendo el futuro».

Camacho transmitió al Ejecutivo francés que la «gestión de la paz» incumbirá a la próxima mayoría parlamentaria emanada de las elecciones del próximo día 20. «Los dos gobiernos tienen la máxima cautela ante la declaración de la banda, ambos gobiernos están de acuerdo en mantener la misma intensidad de trabajo policial a fin de garantizar la seguridad de los ciudadanos», dijo en una comparecencia que sonó a despedida de los interlocutores de París. «Quienes más han sufrido han sido las víctimas del terrorismo y cualquier Gobierno que gestione la paz tendrá que tenerlas siempre en cuenta, porque son el ejemplo más claro del sufrimiento», concluyó.

DIARIO VASCO, 3/10/11