EL MUNDO, 17/9/11
La Diputación anuncia que creará una lista de vascoparlantes y PSE y PP denuncian que su voluntad es catalogar a los ciudadanos como hicieron «regímenes totalitarios»
Nada más acceder al poder, en la presentación de su equipo de gobierno, el diputado general de Gipuzkoa, Martín Garitano (Bildu), se comprometió a gobernar para todos los guipuzcoanos sin exclusión, pero a renglón seguido se negó a hablar en castellano porque el euskara es la «lengua mayoritaria» en el territorio.
Este gesto despertó la preocupación en diversos ámbitos por la política lingüística que iba a emprender el Gobierno foral, con el castellano «marginado». PSE y PP confirmaron sus temores el jueves en las Juntas Generales con la intervención del director de Euskara, Zigor Etxeburua, para exponer las líneas maestras de su departamento y donde dejó entrever que se va a «castigar al castellanoparlante con la exclusión», según censuraron ayer ambos partidos.
El principal motivo de preocupación radica en la intención del Gobierno foral de crear un «registro de vascoparlantes» que «pretende clasificar a los guipuzcoanos», según denunció la portavoz del PSE, Rafaela Romero, que basa sus temores en que Etxeburua rehusó dar detalles de este registro ni su finalidad. Y la desconfianza se acrecentó aún más si cabe después de que Garitano, que estaba presente en la comparecencia, respondiera con el «silencio» a la pregunta «directa» de qué va a hacer Bildu con este registro. «Su silencio nos preocupa mucho», aseveró.
La «preocupante» intervención del director de Euskara tuvo lugar en la Comisión de Reglamento, donde los responsables de las cinco áreas adscritas al gabinete del Diputado General, flanqueados por Garitano, expusieron los ejes de su actuación para la legislatura. Ante este silencio, el PSE ha registrado en la Mesa de la Cámara Foral una decena de preguntas dirigidas al diputado general para que detalle cuál es el objetivo que se persigue con este registro. Además, los socialistas han interpelado aGaritano para que explique cuándo tiene previsto dar inicio a la recopilación de datos, en base a qué competencias ejecutará este proyecto y cómo se articulará la creación y puesta enmarcha de esta iniciativa.
Asimismo, el diputado general deberá informar sobre si será «voluntario u obligatorio» para los ciudadanos informar sobre su conocimiento del euskara, qué consecuencias tendrá la inscripción o no de este registro, cómo se acreditará la condición de vascoparlante o qué efectos tendrá no ser vascoparlante.
Romero reclamó respuestas a estas «inquietudes» ya que, de lo contrario, quedará de manifiesto que «la voluntad de Bildu es catalogar y clasificar a la ciudadanía y eso tiene que ver mucho con regímenes totalitarios de espeluznante recuerdo».
Igual de preocupado se mostró el portavoz del PP, Juan Carlos Cano, quien estima que Etxeburua evidenció con su discurso que pretende «llevar al extremo el uso del euskara» por «finalidades políticas».
EL MUNDO, 17/9/11