EL MUNDO 11/01/15
Al Qaeda y el Estado Islámico tenían a Francia en el punto de mira. Días antes de los atentados de París, estas organizaciones habían dado la orden de ataque a sus lobos solitarios, en una pugna por el liderazgo yihadista a través de un atentado espectacular. Los líderes de Al Qaeda llamaron a «los leones de Alá» a golpear Occidente y los del IS a «matar y escupir el rostro de los cruzados», según documentos a los que ha tenido acceso EL MUNDO.
La sangrienta profecía comenzó a cumplirse el miércoles con el atentado contra Charlie Hebdo, en el que murieron 12 personas. Y continuó el viernes con el ataque a un supermercado kosher que se saldó con la muerte de cuatro rehenes, además del secuestrador. Los terroristas reivindicaron las acciones para ambas organizaciones.
Tanto Al Qaeda como el Estado Islámico (IS, en sus siglas en inglés) esperan conseguir con estas operaciones terroristas un efecto llamada que atraiga un mayor número de seguidores para engrosar sus filas. Los expertos advierten que cientos de jóvenes se están radicalizando de forma muy rápida a través de las redes sociales, que están siendo instrumentalizadas por ambas organizaciones.
Precisamente Twitter fue el medio elegido por el Estado Islámico para alentar a sus seguidores a llevar a cabo ataques en Francia a través de un vídeo difundido el 19 de noviembre. IS hizo un llamamiento a los musulmanes a unirse a sus filas en Siria e Irak y animó a los lobos solitarios a cometer atentados en Francia. También sugería «utilizar venenos en los alimentos o en el agua y a atropellar a ciudadanos».
El vídeo, que tiene siete minutos y 19 segundos de duración y está subtitulado en inglés, también se distribuyó en foros yihadistas de las redes sociales. Lleva por título un mensaje movilizador: «¿Qué estás esperando?». En él, tres hombres queman sus pasaportes y luego, sentados juntos, hablan a cámara. Se identifican como Abu Osama al Faransi, Abu Maryam Al Faransi y Abu Salman Al Faransi (apodos con el apelativo Al Faransi, que en árabe significa el francés, donde el gentilicio se usa para dar idea del país de origen).
Todos piden a los musulmanes que se unan a Daesh (acrónimo en árabe de Estado Islámico) y a su califato y que hagan ese viaje antes de que ya no les sea posible. Entonces Abu Maryam sugiere a su audiencia que, si no pueden acudir, lleven a cabo ataques en el país, en Francia.
«Aterrorizadles y no les permitáis dormir debido al miedo y al horror. Hay armas y coches disponibles y objetivos listos para ser golpeados. Incluso el veneno está disponible, por lo que envenenad el agua y los alimentos de por lo menos uno de los enemigos de Alá», insiste. «Matadlos y escupidles en el rostro y pasad sobre ellos con vuestros coches», llega a ordenar.
«Haz lo que seas capaz de hacer con el fin de humillarles, porque ellos merecen sólo eso», concluye la intervención de Abu Maryam, según los citados documentos. La llamada lanzada por los tres combatientes concuerda con el mensaje del portavoz de IS, Abu Muhamad al Adnani, quien en septiembre hablaba de que los fieles del grupo yihadista actuarán como lobos solitarios en respuesta a los ataques aéreos de la coalición. Francia era uno de los países propuestos para perpetrar tales atentados junto con EEUU, Australia y Canadá. Antes, el 13 de noviembre, el líder de Daesh, Abu Bakr al Bagdadi, afirmó su intención de extender el califato, proclamado el pasado verano en Irak, «en todo el mundo árabe y Europa» y añadió que el grupo continuará «su lucha contra todos sus enemigos». Era el primer discurso oficial del líder del IS desde el verano, cuando lanzó una acalorada soflama una semana después de proclamar el califato islámico, el pasado 29 de junio.
El mensaje proclama «el fracaso» de la coalición internacional liderada por EEUU contra Daesh. «Quédense tranquilos, musulmanes, porque su Estado va bien», dice el líder del Estado Islámico. «El avance de los muyahidin continuará hasta Roma», añade en una nueva amenaza contra Occidente. «Pronto los judíos y los cruzados se verán obligados a bajar al terreno y a enviar a sus tropas terrestres a la muerte y destrucción», agrega el autoproclamado califa.
Al Qaeda, a través de su rama en Yemen, Al Qaeda en la Península Arábiga (AQAP), hizo su propio llamamiento a atacar Occidente tan solo días antes del atentado de París, el 24 de diciembre. En un artículo publicado en el número 13 de su revista en inglés, Inspire, bajo el título «Los leones de Alá, que están en todo el mundo», se invoca a los lobos solitarios, descritos como «la peor pesadilla de Occidente». Otro artículo señala los objetivos por orden de preferencia: «La primera prioridad es América, después el Reino Unido y luego Francia», y también señala a los países miembros de la OTAN como blanco.
El número de esta revista se titula elocuentemente: «Neurotmesis, cortar los nervios y aislar la cabeza». Incluye los símbolos del euro, la libra esterlina y el dólar estadounidense. Una vasta parte del contenido está consagrado a los ataques de los lobos solitarios y profiere amenazas contra las compañías aéreas, con un gran énfasis en la fabricación de bombas ocultas, revela el contenido del dossier consultado por este periódico.
Con un gran despliegue de fotos explicativas, la revista –que se publica online desde 2010– dedica varias páginas a dar instrucciones para «fabricar la bomba oculta», un detonador casero fácil de transportar dentro de un casco de botella de agua de plástico de 17 centímetros.
Varias voces habían advertido antes del riesgo de dejar de lado la amenaza de Al Qaeda frente al más pujante IS. Expertos como el alemán Guido Steinberg o el paquistaní Ahmed Rashid habían dado la voz de alarma en EL MUNDO sobre el hecho de que Al Qaeda buscaría un atentado espectacular en Europa para contrarrestar la influencia de IS en el yihadismo global. Said Kouachi, uno de los hermanos que atentaron contra Charlie Hebdo, recibió entrenamiento de AQAP en Yemen.
La radicalización a través de internet, notablemente por medio de las redes sociales, es un fenómeno en alza que preocupa a las fuerzas de seguridad de Europa y EEUU. El peligro real es que individuos que han pasado por un proceso de radicalización exprés puedan llegar a convertirse en lobos solitarios que atenten en sus países de origen.