EL MUNDO – 11/02/16
· Todos los partidos cargan contra el líder de ERC por rescatar como directivo a Josep Antoni Rosell, que está en libertad con cargos.
La política catalana se vio ayer rodeada de una gran polémica tras conocerse la recolocación como alto cargo de un ex director de licitación de la obra pública de la Generalitat imputado por el caso del 3%. Todos los grupos de la oposición reclamaron al conseller de Economía, Oriol Junqueras, que dé explicaciones en la Cámara por mantener a Josep Antoni Rosell entre los mandos con capacidad de decisión de Infraestrucutures.cat, pese a haber sido señalado por la Fiscalía y la Guardia Civil como enlace con la Administración de la trama de comisiones irregulares de Convergència.
El Consejo de Dirección de Infraestructures.cat aprobó a inicios de año que Rosell pasara a ser el máximo responsable del proyecto de actuaciones internacionales y de investigación de la empresa pública. Hasta ese momento, Rosell se encontraba temporalmente apartado de sus responsabilidades como director general tras haber sido detenido por la Guardia Civil el pasado 21 de octubre por orden del juez de El Vendrell que instruye el caso3%. Una situación de semiaislamiento profesional que se ha prolongado hasta que el nuevo Govern, con Junqueras ya como máximo responsable de Economía –cartera de la que depende Infraestructures.cat–, trasladó a Rosell hasta el área internacional del organismo. El alto cargo estuvo dos días encarcelado cuando fue detenido y se encuentra en libertad con cargos
Los grupos parlamentarios de C’s y el PSC confirmaron a este diario que en los próximos días reclamarán la comparecencia de Junqueras en el Parlament para que dé explicaciones por lo que portavoces de ambos partidos coincidieron en definir como «un escándalo». El PP, por su parte, también preguntará al vicepresidente del Govern por «lo que no es otra cosa que un total despropósito», según lo describió el diputado Santi Rodríguez.
La diputada de la CUP Anna Gabriel también anunció que la izquierda independentista incluirá el nombre de Rosell en la lista de nombramientos del Govern que despiertan «inquietud» entre sus filas. El partido entregará la lista de nuevos altos cargos al equipo del president en la próxima reunión para tratar sobre el pacto de estabilidad entre Junts pel Sí y la CUP. Preguntada sobre si la reubicación de Rosell podría afectar al acuerdo, Gabriel eludió responder.
Todos los grupos parlamentarios señalaron a Junqueras como responsable del caso. Sobre todo después de haber convertido la lucha contra la corrupción en un supuesto pilar del nuevo Govern. Según el diputado de C’s Carlos Carrizosa, mantener a Rosell supone «proteger al núcleo duro de la corrupción en Cataluña». Jordi Terrades, del PSC, lamentó directamente que Junqueras permita la situación pese «a haber hecho bandera de la lucha contra la corrupción».
Paradójicamente, el líder de ERC inauguró su cargo cobrándose la destitución de un alto cargo que se vio salpicado, de forma indirecta, por el mismo caso. Núria Bassols fue destituida en enero como comisionada para la Transparencia por la imputación en octubre de su marido, Josep Maria Bassols, en el caso de las comisiones del 3%. Junqueras dijo entonces que «si la comisionada se encuentra con el marido detenido por un caso de presunta corrupción, se debería tomar alguna decisión: destituirla o dimitir».