José F. Peláez-ABC

  • Por supuesto se votó. Y los sanchistas perdieron 105 a 14

El PSOE cada vez se parece más al Partido Comunista Chino. La visita a Xi Jinping le ha debido de dar ideas a Sánchez, al que solo le ha faltado ordenar bruxismo general y el despliegue de una lona con su cara en el hotel vallisoletano en el que se reunía el comité autonómico del partido en Castilla y León. Que, por supuesto, era de cinco estrellas, no fuera a despistarse alguien. Allí Tudanca propuso a votación el calendario para el proceso de primarias que, de manera legal y conforme a los estatutos, comenzaría mañana y se votaría antes del Congreso Federal. Nada nuevo bajo el sol. Y, sin embargo, esto no les debió de gustar al secretario provincial de León, Javier Cendón, ni al secretario de Estrategia y Acción Electoral de la Ejecutiva Federal, Javier Izquierdo –los Javis–, quienes intervinieron para mostrar su malestar porque Tudanca no diera facilidades a Ferraz para que le apuñalaran según lo previsto. El segundo de ellos –que dijo hablar en nombre del secretario general– llegó a advertir que el proceso que estaban a punto de votar no era del agrado del líder y no contaba con su visto bueno. Solo le faltó decir que era el enviado por aquel cuyo nombre no puede ser pronunciado, por el Innombrable, por Cthulhu, y hacer ahí mismo un sacrificio, matar una cabra, qué sé yo. Un bochorno, según cuentan.

Por supuesto se votó. Y los sanchistas perdieron 105 a 14. Ojo, que no estuvo ni reñido: 105 a 14 es un resultado de los Lakers contra mis colegas. En el comité autonómico hay más gente que cree que Elvis está vivo que apoyos a Sánchez. Bien, pues el día siguiente al pucherazo, cacicada, urnas escondidas de nuevo siguiendo la tradición pedrista, anulación colonialista de la votación por parte de Ferraz y apercibimiento a Tudanca, que es un señor que tiene pinta de cocinar platos combinados y al que van a acabar convirtiendo en William Wallace.

Les está bien empleado. A los que tenemos claro lo que es el sanchismo no nos sorprende. Pero que les pase a ellos, que han llevado a Pedro bajo palio, tiene algo de justicia poética. En cualquier caso, el análisis de lo sucedido lleva a pensar que Sánchez ha de tener un candidato alternativo para enfrentarse a Tudanca, que se presentará, contra las advertencias de Ferraz, aunque aún no lo haya anunciado. Y, sin embargo, ni siquiera esto está claro. Puente y López –los Óscars– parecen apostar por Ana Redondo. Y también Zapatero. Pero sea quien sea, perderá contra Mañueco. Y aunque eso no gusta, tiene un pase. Pero presentarse para perder contra Tudanca es ‘heavy metal’. Por eso es posible que ni siquiera haya candidatura alternativa y todo esto sea solo un aviso para el resto de federaciones con el único objetivo de dejar claro quién manda.

Los problemas ya no son puntuales, el tumor tiene metástasis en Aragón, Castilla-La Mancha, Asturias, Madrid, Extremadura y ahora también en Castilla y León, que, además, se subleva. Sánchez, ya solo líder del PSC, empieza a tener problemas serios. La descomposición ha comenzado.