EL MUNDO – 01/04/15
· La Audiencia Nacional rechaza las peticiones masivas de traslado a prisiones del País Vasco
Ni existe un derecho de los presos etarras «a cumplir condena en centros penitenciarios próximos a su domicilio o residencia habitual», ni puede considerarse como «trato inhumano ni degradante en sí mismo el hecho del cumplimiento de la condena en centro penitenciario distinto del que solicita el interno como de su preferencia».
Esas dos afirmaciones forman parte de los 30 autos con los que el Juzgado Central de Vigilancia Penitenciaria de la Audiencia Nacional ha rechazado las peticiones de presos etarras de ser trasladados a prisiones del País Vasco. Otros tantos internos recibirán igual respuesta en los próximos días por parte de los magistrados José Luis de Castro y María Reyes Jimeno. Los presos habían reclamado su traslado al centro alavés de Zaballa, donde están internos los arrepentidos de la vía Nanclares. El resto de presos etarras, salvo casos excepcionales de salud, cumplen pena fuera del País Vasco.
Los magistrados indican que los asuntos de traslados corresponden a la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias y a los jueces de lo contencioso, no a la vía penal que ellos representan. Pese a ello, aceptan entrar a examinar los casos ante la alegada vulneración de derechos que los presos achacan a su alejamiento físico: derecho a las comunicaciones y visitas, defensa, salud y acceso a la educación.
Ninguno se ha visto afectado. Y aunque fuera así, dicen los jueces, el traslado tampoco sería la solución. «No consta acreditada en autos una concreta vulneración de ninguno de los derechos alegados por el interno susceptibles de corregirse por medio de un traslado».
Los jueces han recabado datos de la vida penitenciaria de cada interno. Al ex número uno de ETA Francisco Múgica Garmendia, Pakito, hoy preso en Zuera (Zaragoza), el juez le recuerda que en los dos últimos años se ha reunido 82 veces con familiares y amigos y que ha hablado por teléfono más veces incluso que las previstas. También ha sido atendido por médicos y abogados cuando lo ha requerido. En cuanto al acceso a la educación, Pakito nunca pidió nada.
«EN MANOS DE ETA»
Mientras haya banda. El ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, declaró ayer que el fin de la dispersión está «en manos de ETA y de sus presos» y que se seguirá aplicando hasta que la banda se disuelva.