ABC 01/12/16
BIEITO RUBIDO
El idioma español goza de buena salud. Lo hablan ya más de 550 millones de personas y su crecimiento es imparable. Fruto de esta pujanza se sitúa como la segunda lengua de comunicación en la red y quienes la emplean representan una capacidad de compra del 10% del PIB mundial. Pocas herramientas tan potentes posee España. De ahí que parezca bastante estéril la polémica que resulta de instrumentalizar políticamente los idiomas cooficiales. Pueden seguir intentándolo. Solo cosecharán melancolía. La irrefrenable expansión del castellano viene acompañada de su repotenciación económica: los intercambios comerciales entre países hispanohablantes se multiplican cerca de cuatro veces. México, EE.UU. y Colombia ya suman más ciudadanos que lo utilizan que la propia España. Más de 20 millones de personas lo estudian sin ser su lengua materna. Solo hay que observar la fortaleza y la juventud de Colombia para entender el tesoro maravilloso que los españoles tenemos con nuestro idioma. Gracias, en gran medida, a ese ejemplar vasco llamado Blas de Lezo.