EL PAÍS 19/04/13
Los agentes retitran uno a uno a cerca del millar de personas que acompañan a los jóvenes desde las 6,34 de la mañana
Un mensaje por megafonia de la Ertzaintza a las seis menos cinco de la madrugada ha despertado de golpe al cerca de millar de personas que acompañaban a los miembros de Segi que acampaban en el Boulevar de San Sebastián en protesta por su condena. Uno de los portavoces de la acampada que estaba de guardia ha anunciado que unas 25 furgonetas de la Policía Vasca se econtraban a pocos metros del quisco de la Avenida, el lugar en el que centenares de simpatizantes de la izquierda abertzale se encuentan acampados desde la semana pasada. Losconcentrados se han levantado inmediatamente y han corrido a rodear a seis de los ocho condenados que se encuentran en las tiendas de campaña. El objetiovo era protegerles y obstaculizar lo más posible su detención.
Mikel Arretxe, Imanol Vicente, Naikari Otaegi, Egoi Alberdi, Aitor Olaizola, Adur Fernández, Oier Lorente y Ekaitz Ezkerra son los ocho militantes de Segi condenados a seis años de cárcel por la Audiencia Nacional —el Tribunal Supremo ratificó la sentencia el lunes de la semana pasada— por pertenencia a banda armada. Todos, entre los 25 y los 30 años, esperan a ser arrestados por la Ertzaintza, en virtud de las órdenes de detención que la Audiencia remitió el lunes.En la acampada están seis de ellos.
La Ertzaintza ha ofrecido a los acampados marcharse libremente
Los agentes han llegado a las seis y cinco de la mañana y han retirado al primero de los acompañantes a las 6,34. Tras acordinar toda la zona, han rodeado el quiosco y la zona próxima al Consistorio y han leído en tres ocasiones que estaban alli para cumplir la orden de la Audiencia Nacional que les obliga a detener a los condenados. Han ofrecido a los concentrados abandonar libremente el lugar y les han advertido de que en caso de no hacerlo podrían incurrir en algun tipo de falta administrativa.
Los agentes han levantado al primer joven a las 6,34 de la mañana. Lo han hecho en grupos de tres y cuatro ertzainas, entre algun que otro forcejeo de los ocnentrados pero sin ningún incidente de importancia, entre gritos a favor de la independencia, de Iñigo Cabacas, el joven que murió hace un año en Bilbao por un pelotazo de la Ertzaintza, y algunos otros que pedían recortes en la Policía vasca.Los organizadores de la acampaña habían advertido durante la noche que no hubiera ningun altercado ni incidente y que si lo hubiera solo sería atribuible a personas infiltradas para reventarla acampada.