«La foto de los ex presos de ETA hiere a las víctimas y revive su dolor»

La Defensora del Pueblo, Soledad Becerril, no puede ni quiere ocultar el dolor que le producen a la institución que preside, y a ella misma, las consecuencias que ha tenido para las víctimas del terrorismo y para otras familias la excarcelación de presos etarras, de asesinos y de violadores. Se pregunta si hubiera sido posible que la sentencia del Tribunal Europeo de Derechos Humanos se aplicara de otra manera. En una entrevista concedida a ABC, el día antes de que el juez Pedraz autorizara la reunión de los ex presos etarras en Durango, la Defensora del Pueblo llega a tiempo, antes de que se publique la entrevista, para mostrar su rechazo a un encuentro que asegura que ha sido «una exaltación de los terroristas». Además, denuncia que la foto de ayer «hiere a las víctimas» y «revive su dolor». Becerril habla abiertamente sobre este asunto que tanto le preocupa y sobre otros temas que marcarán la agenda política de este año, como son el desafío secesionista lanzado por Artur Mas y el descrédito de la clase política.

P—¿Qué le ha parecido la reunión de los ex presos etarras en Durango? ¿Es un desafío al Gobierno?
R—La mera reunión y la foto son una exaltación de los terroristas, de los que han cometido atentados terroristas, porque si no no habría foto, ni reunión. El juez sabrá lo que hace.

P—¿La foto de hoy (por ayer) es un insulto a las víctimas y a sus familias?
R—Estoy segura de que aquellas familias que han visto la foto van a revivir el dolor. Es herir de nuevo a las víctimas y a sus familias. Los presos etarras no merecen estar libres ni recibir un trato como los demás. Ni lo que dicen ni lo que hacen es aceptable.

P—¿Cree que podrían haber aprovechado esta reunión para pedir perdón?
R—No hace falta esta convocatoria para pedir perdón, pueden hacerlo en cualquier momento. No veo en su ánimo pedir perdón.

P—¿Por qué ha decidido pedir al Gobierno información sobre la forma en que se ha aplicado la sentencia del Tribunal Europeo de Derechos Humanos que deroga la doctrina Parot?
R—Tenemos la obligación de responder a las personas y entidades que se dirigen a nosotros presentando una queja. Esa queja ha merecido que preguntáramos a los Ministerios del Interior y de Justicia aspectos relativos a la ejecución de la sentencia. Ha sido un trámite normal. Es un asunto grave y de enorme trascendencia que a mí, personalmente, me ha conmovido. No es, como he escuchado, que iniciemos una investigación. Es una actuación de oficio.

P—¿Considera que España ha aplicado con excesiva rapidez la sentencia? ¿Se podía haber hecho de otra manera?
R—La sentencia ha sido durísima, extraordinariamente dura, para España, para las víctimas y para sus familias. El Gobierno debe acatarla; ahora bien, nosotros nos preguntamos, y es lo que queremos saber, si podría haberse ejecutado caso por caso, haberse aplicado de otra manera, puesto que esta no es una sentencia piloto que deba aplicarse de un modo mimético a todas las personas que estaban aproximadamente en una situación similar a la persona recurrente, Inés del Río.

P—¿Cree que el Gobierno español ha hecho una buena defensa de la doctrina Parot ante el Tribunal de Estrasburgo?
R—Creo que ha sido una defensa muy buena, hasta el punto de que tras la vista, en determinados círculos informados, se pensaba que sería favorable para España. Después, a lo largo de los meses, seis aproximadamente, cambiaron los aires y la sentencia ha sido muy negativa. Pero esa defensa, llevada a cabo por abogados del Estado ha sido magnífica. Lo que nosotros pedimos es información sobre la aplicación de la sentencia.

P—Ha llegado a calificar de obscena la exhibición que han hecho los presos etarras tras su liberación.
R—Para las víctimas ha sido muy humillante, muy doloroso. Yo he hablado con víctimas y se les saltaban las lágrimas cuando han visto y oído la sentencia y sus consecuencias. Hay que comprender su situación y cómo han revivido el dolor que han sufrido y que mantendrán siempre.

P—¿Hay que tomar en consideración el último comunicado de los presos de ETA?
R—No piden perdón ni muestran arrepentimiento alguno. Es un minúsculo paso, un minúsculo comentario sobre el daño y el horror que han causado. Tan mínimo que llegan a hablar de daño multilateral. ¿De qué daño están hablando? Aquí no ha habido múltiples actores, no ha habido más que asesinos y víctimas. El comunicado es muy poca cosa.

P—¿Espera que el final de la historia de ETA se escriba con vencedores y vencidos?
R—Tiene que haber vencedores y vencidos. Que el final de esta banda sea la entrega de las armas y su disolución. Que los historiadores puedan decir al cabo de sesenta años que esta lucha se ganó. ¿Quién la ganó? España y los millones ron con las de españoles leyes, con que la Constitu- cumplieción, víctimas muchos de estos de los sesenta cuales años fueron de terror

P—Junto propiciados con el fin de por la banda la banda. ETA, otro manejar de los el asuntos Gobierno que este tendrá año con que firmeza dentista será de Artur el desafío Mas. ¿Confía indepen- en que mún al y final no se impere convoque el sentido la consulta coindependentista?
R—Lo espero y lo deseo ardientemente. La ruptura de una nación es algo muy dramático. Espero que no llegue a producirse la consulta y que se tiendan los puentes y los lazos necesarios para hacer comprender al Gobierno de Cataluña que juntos nos va a ir a todos mucho mejor.

Desafío de Artur Mas «No ha habido agravios hacia Cataluña en la España contemporánea, solo respeto y reconocimiento»

P—¿Piensa que se ha tergiversado la relación de Cataluña con el resto de España apelando a una hostilidad que no es real?
R—En la España contemporánea no ha habido agravios hacia Cataluña ni hacia ninguna Comunidad. Ha habido un respeto, un reconocimiento y un esfuerzo del conjunto de los españoles para que la Transición, en la parte de cesión de competencias, se hiciera con generosidad. Muy pocas constituciones en el mundo han sido tan reconocedoras y respetuosas con las peculiaridades o particularidades de regiones o comunidades.

P—¿Qué es lo que ha sucedido para que se llegue a esta situación de conflicto?
R—En términos generales, sobre las identidades existe en este momento en la historia contemporánea española un exceso en subrayar y resaltar las identidades. Eso ha sucedido en Cataluña y en otros muchos lugares fuera de España.

P—¿Confía en que el presidente Rajoy, llegado el momento, aplique la Constitución para defender la unidad de España, si está en peligro?
R—No sé lo que hará Rajoy, pero lo único que puedo decir es que estoy segura de que defenderá, como presidente de un Gobierno democrático, la Constitución.

P—¿Qué se ha hecho mal en la política española para que el Gobierno catalán haya llegado a esta situación de enfrentamiento con el resto de España?
R—La Constitución se hizo muy bien en su afán de que todos pudiéramos convivir. A lo largo de su desarrollo seguramente hemos hecho cosas mal, unos gobiernos y otros. Ha habido confianza y respeto hacia Cataluña, el País Vasco, Andalucía…, pero hacen falta también personas al frente de los gobiernos imbuidas de ese espíritu de colaboración, de aceptación y de ese deseo de convivencia. Ha habido momentos en que esas personas han fallado.