«La gente nos reclama cambio de liderazgo»

EL MUNDO 03/11/13
ENTREVISTA, EMILIANO GARCÍA-PAGE

La entrevista se celebra en el Ayuntamiento de Toledo, en el único hueco que tiene en toda la semana. No es de extrañar porque, además de las obligaciones como alcalde, es una voz autorizada y escuchada en los poderosos conciliábulos de Ferraz, donde hay gran expectación por la Conferencia Política, a la que él no es ajeno. Sin embargo, cuando tiras de currículo y le insistes en que podría ser idóneo candidato en unas primarias –joven (44 años), suficientemente preparado (licenciado en Derecho) y con amplia experiencia tanto a nivel orgánico (secretario general de los socialistas de Castilla-La Mancha) como institucional (concejal, consejero de varios departamentos, vicepresidente del Gobierno autonómico, alcalde y senador)–, corta de raíz el argumento con un: «Currículo no es igual a capacidad». Insinúa, pero no aclara, si su objetivo final será reconquistar para los socialistas Castilla-La Mancha y arremete inmisericorde contra quien podría ser su adversaria electoral: María Dolores de Cospedal, lo cual es un dato.

Pregunta.–De nuevo el derecho a decidir en Cataluña ha fracturado al Grupo Socialista en el Congreso. ¿Hay salida para el enfrentamiento entre el PSOE y PSC?
Respuesta.–Yo defiendo el derecho a decidir, pero de todos los españoles. Además, cuando el PSC defiende el derecho a decidir por la vía constitucional está reconociendo que una decisión así supondría una profunda reforma constitucional que tiene que ser votada por todos. El debate sobre el derecho a decidir del PSC es más aparente y estéril que de fondo. Hay que intentar entablillar la herida antes de usar el bisturí.

P.– ¿Comparte la idea de Chacón de que hay que tripular al PSOE con un claro discurso en toda España contra el separatismo?
R.– El PSOE no es nacionalista y no se le puede discutir su vocación española. Lo lleva en las siglas, en su ADN constitucional. Es más, si el PSOE albergara alguna duda sobre la unidad de España, la soberanía nacional y que el derecho a decidir es de todos, yo abandonaría la Ejecutiva Federal. Soy testigo de que en la dirección nadie discute que el derecho a decidir es de todos.

P.– ¿Qué le parece el choque de trenes al que está llevando Mas a Cataluña? ¿Al final habrá referéndum?
R.– Artur Mas va a destrozar CiU, ha decidido inmolarse en el altar de la independencia y está en clave estrictamente personal. Aspira a que las futuras generaciones le reconozcan como un mártir del independentismo, pero no va a ser héroe, y lo sabe porque está llevando a Cataluña a un callejón sin salida.

P.– ¿Qué tendría que hacer el Gobierno si finalmente lo hace por las malas y plantea el referéndum?
R.– Entre Mas y Rajoy, siempre apoyaremos a Rajoy, pero Rajoy no puede hacer de Don Tancredo, como está haciendo, porque perjudica la unidad de España. Esto no puede acabar ni con negociaciones bajo la mesa ni con ambigüedades.

P.– ¿La solución para Cataluña pasa por cambiar la Constitución, como dice Rubalcaba?
R.–No. Un cambio constitucional no es la solución. Dentro de la Constitución hay márgenes para que todos nos sintamos cómodos, también Cataluña. La Constitución no pueder ser un arma arrojadiza, ni contra Cataluña ni al revés.

P.– ¿El PSOE se seguirá desangrando, como vaticinan las encuestas, o debe cambiar de rumbo y capitán?
R.– El PSOE va a dar un giro de 180 grados y se va a presentar al electorado con un planteamiento de cambio. Que nadie espere que reneguemos de nuestra historia o demos bandazos ideológicos, pero va a haber cambio en todos los sentidos: de propuestas, imagen y personas. La pelota para no desangrarnos electoralmente está en nuestro tejado y debemos presentarnos como una alternativa ante la sociedad.

P.– Si en la Conferencia que se celebra esta semana no se debate el tema de las primarias ni se despeja el liderazgo, ¿para qué va a servir?
R.– En la Conferencia, el PSOE va a certificar que hemos hecho la digestión de la derrota y del zarandeo electoral. Debemos salir fortalecidos ideológicamente. Al PSOE le urge asumir riesgos, pero no aventuras. El mayor riesgo para el PSOE es el inmovilismo, no asumir el riesgo de cambiar. Pero no nos engañemos: la gente también reclama al PSOE un cambio de liderazgo.

P.–¿Piensa que Rubalcaba no será el próximo cartel electoral?
R.– Sí, mi intuición me dice que no lo será. Reúne todas las condiciones y sería un buen presidente del Gobierno, pero tiene que valorar si éste es su tiempo o su tiempo ha pasado.

P.– Usted, que tiene currículo, experiencia sobrada de gestión y es de los pocos que gana elecciones, ¿irá finalmente a las primarias?
R.– Es mejor mi currículo que mi capacidad. Soy joven, aunque no tanto, tengo experiencia y no me puedo quejar de mis resultados electorales. Pero una cosa es el currículo y otra la capacidad.

P.– Vamos, que no se ve capacitado para ser presidente del Gobierno.
R.– No descarto intervenir en el debate del PSOE a nivel nacional, pero me importa más que el PSOE no se eche al monte y recupere un papel mayoritario firme en sus valores que presentarme a primarias.

P.– ¿Me está diciendo que su terreno de juego estará en Castilla-La Mancha, para enfrentarse a Dolores de Cospedal?
R.– No lo tengo decidido. La gente me anima para que cambie la situación de Castilla-La Mancha. Pero yo no me voy a poner de perfil en el debate nacional. Estoy dispuesto a jugar fuerte para que el PSOE encuentre su camino como el partido nacional que siempre ha sido.

P.– La falta de credibilidad del PSOE es lógica, viendo casos como el de los ERE de Andalucía…
R.– A nuestro partido se le castiga más que al resto por la corrupción. Dicho esto, los partidos deberían tener un servicio de Asuntos Internos, similar al de, por ejemplo, la Policía, que se encargara de detectar y prevenir los problemas de corrupción.

P.– ¿Como alcalde de Toledo ha investigado qué paso con la concesión de basuras a Sufi y si hubo o no comisión ilegal al PP?
R.– Hay que preguntarse quién miente, si Cospedal o el PP, porque cada uno dice una cosa. Hay dos supuestos: que la limpieza se adjudicara a alguien que pagó por ello o que a quien se le adjudicó porque era el mejor le hubieran pedido dinero después. Los dos casos son un supuesto cohecho, aunque sea difícil de demostrar. Cospedal reconoció que existían los 200.000 euros y dijo que eran para la campaña electoral. ¿Ahora todo eso es mentira?

P.– Al menos hay que reconocer que Cospedal, cuando llegó a Génova, cortó las prácticas de Bárcenas.
R.– No es cierto que Cospedal cortara con ninguna práctica de Bárcenas. Hasta el 31 de enero de este año ella aceptó tenerlo afiliado a la Seguridad Social, le pagaba la nómina, un contrato, un coche oficial y la defensa. Lo que pasa es que Cospedal, cuando ha visto que el barco se hundía, ha saltado dejando tirado al capitán, que es Rajoy. El que más debiera preocuparse de la situación de Cospedal es Mariano Rajoy.

P.– ¿Por qué? ¿A qué se refiere?
R.– A que Cospedal aspiraba a ser la sucesora de Rajoy en el liderazgo de la derecha española y le ha salido mal la jugada. Ahora está tan desprestigiada que no puede liderar el PP y se le ha atragantado la ciudadanía de Castilla-La Mancha, porque ha querido estar en misa y repicando. Y eso no puede ser.