EL CORREO 19/11/12
Los promotores del nuevo partido han remitido a las cárceles la ponencia fundacional para que sea debatida por los reclusos.
BILBAO. La izquierda abertzale quiere hacer partícipe del debate fundacional de Sortu a los presos de ETA. Los promotores de la nueva marca independentista anunciaron ayer que han enviado al colectivo de reclusos la ponencia constituyente del partido. El objetivo es que el denominado ‘frente de makos’ «realice sus aportaciones» al debate que se ha abierto este pasado fin de semana.
La nueva formación inició el sábado el proceso de definición de Sortu, con asambleas populares en el País Vasco y Navarra, dentro de un calendario que debe concluir el próximo 23 de febrero, aniversario del golpe de Estado del teniente coronel Antonio Tejero, con la celebración de su congreso fundacional en una capital aún por decidir.
La antigua Batasuna ha presentado ya las líneas maestras del ideario del partido recién nacido, entre las que figura la exigencia de la independencia para Euskal Herria, pero no de forma inmediata, sino a partir de un procedimiento de varios años con fases intermedias. Antes de la secesión, por ejemplo, se plantea la conformación de una comunidad autónoma entre Euskadi y Navarra, siempre dentro de España. Algo que requeriría que los navarros aceptaran esa unión, lo que no parece sencillo en estos momentos.
Unos planteamientos que no son nuevos dentro de la izquierda abertzale –la unión de País Vasco y comunidad foral ya la abanderaron HB en los noventa y Arnaldo Otegi en las conversaciones de Loyola–, pero sí suponen un cambio de criterio respecto de los posicionamientos históricos del movimiento independentista. Para evitar críticas, los promotores de Sortu han decidido trasladar la ponencia también a las cárceles para que los presos la debatan y puedan realizar aportaciones sobre el documento ya elaborado. El partido sostiene que, con este gesto, pretende que el colectivo de reclusos sea «parte» del «proceso de creación» de la nueva marca.
La antigua Batasuna sabe que el grupo que representa el EPPK es uno de los más sensibles al proceso de transformación que el movimiento político ha sufrido desde 2009. La izquierda abertzale asegura que el 90% de los internos etarras ha aceptado la apuesta exclusiva por las vías pacíficas, pero es consciente de que hay otro diez por ciento que no ve con buenos ojos el camino emprendido. Esta minoría, aseguran fuentes abertzales, está bastante condicionada por los mensajes que le suelen transmitir «desde el exterior» familiares y amigos que, según las mismas fuentes, discrepan con la actual línea política.
De ahí que ayer Sortu asegurara que los presos deben estudiar el texto que se les ha enviado y realizar sus aportaciones porque, en su opinión, «tienen que ser parte del proceso de liberación, así como del proceso de creación de Sortu».
EL CORREO 19/11/12