ABC, 14/7/12
La Conferencia de Alto Nivel sobre Víctimas del terrorismo apuesta por poner cara e internacionalizar el testimonio de quienes sufrieron el azote de la barbarie terrorista
La experiencia y el liderazgo internacional de España en el tratamiento a las víctimas del terrorismo hizo esta semana a Madrid capital mundial del Foro Global contra el Terrorismo. Dos jornadas que reunieron a una treintena de países para compartir buenas prácticas en la labor de apoyo a quienes han sufrido el azote terrorista.
La Conferencia de Alto Nivel sobre Víctimas del Terrorismocoincidió con el 15 aniversario del secuestro y posterior asesinato de Miguel Ángel Blanco. El ministro de Exteriores español, José Manuel García-Margallo, hizo referencia al llamado «espíritu de Ermua» en su discurso de inauguración: «La ciudadanía se puso de forma masiva al lado de las víctimas y en contra de los verdugos. A partir de ese momento empezó lo que se materializó después con la derrota del terrorismo».
En definitiva, poner cara a las víctimas. Ese es precisamente uno de los puntos de la Declaración de Madrid: «Animamos a continuar poniendo rostro humano a las consecuencias trágicas del terrorismo para hacer frente al exterminio violento y reducir los episodios de actividad terrorista».
En ese sentido, el Foro Global contra el Terrorismo apuesta por «dar voz a las víctimas del terrorismo en todas sus formas y manifestaciones» con el objetivo de ofrecerles «más oportunidades de compartir sus vivencias». Ya lo apuntó la subsecretaria de Estado de EE.UU. para Seguridad Civil, Democracia y Derechos Humanos, María Otero, que pidió un esfuerzo para que las víctimas «instruyan al mundo sobre el dolor infringido por los terroristas».
Otro punto abordado por Otero fue el acceso de las víctimas a toda lainformación necesaria para que los criminales no salgan impunes. Y puso como ejemplos a países que han implementado circuitos cerrados que permitan seguir los juicios contra los asesinos desde el mismo lugar de residencia de los afectados.
El Foro Global contra el Terrorismo se creó días después del décimo aniversario del 11-S en un intento de fomentar un espacio de discusión en favor de la lucha contra el terrorismo, dentro de la estrategia antiterrorista de Naciones Unidas. La Declaración de Madrid se compromete a garantizar «que las víctimas jamás caerán en el olvido».
Francia trasladó al Foro su modelo de ayuda a las víctimas, sobre todo en la «fase larga y pesada de los procesos judiciales». Los países participantes, entre los que se incluyen China, Turquía, Italia o Rusia, abogan por proporcionar acceso a servicios sociales y de apoyo profesional.
Entre los quince puntos de la Declaración de Madrid, los países participantes pactan también proteger la dignidad de las víctimas crear cuerpos de seguridad y personal de primera intervención para atender sus necesidades o reforzar el intercambio de información sobre medidas antiterroristas.
«El testimonio ejemplar de las víctimas –concluyó el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz– es el mejor aval de nuestro sistema de convivencia pues nos recuerda que la libertad y los derechos fundamentales no son gratuitos y en su defensa muchos ciudadanos han perdido sus vidas».
ABC, 14/7/12