EL CORREO 07/01/15
· Los organizadores tratarán de exhibir músculo el sábado, a tres días del fallo sobre las penas cumplidas por los reclusos en Francia
La izquierda abertzale confía en reunir a miles de personas en la tradicional marcha en apoyo a los presos de ETA que recorrerá el sábado las calles de Bilbao. La manifestación volverá a convertirse, como cada arranque de año, en una exhibición de músculo, con la circunstancia en esta ocasión de que se celebrará en puertas de que el Tribunal Supremo avale o no el próximo martes si contabiliza como pena cumplida a los reclusos el tiempo que permanecieron en prisión en Francia.
La convocatoria corre a cargo de Sare, la red ciudadana a favor de los derechos de los presos, exiliados y deportados vascos, que ya ha anunciado que la marcha discurrirá de manera silenciosa y sin pancarta alguna. El objetivo es «aglutinar a todos los sectores» para «llenar hasta arriba» las calles de la capital vizcaína, en busca de una clara señal de fortaleza, pero también de pluralidad. Esta idea fue precisamente la que llevó este fin de semana, el presidente de Sortu, Hasier Arraiz, a hacer un llamamiento «a toda la base social del PNV» a «unir esfuerzos» con la militancia de EH Bildu para trabajar en favor de «los derechos humanos de los presos políticos vascos», en alusión a la manifestación del 10 de enero. Arraiz invitó de forma expresa a la militancia jeltzale, consciente de que en la cita de este año no se repetirá la imagen de 2014, cuando dicha manifestación volvió a sacar unidos a la calle al PNV y la izquierda abertzale. El propio Arraiz recordó el pasado domingo que el líder del GBB, Joseba Egibar, participó el año pasado en la cita, pero «no estará» esta vez.
La cúpula peneuvista decidió compartir entonces pancarta con EH Bildu en respuesta a la decisión del juez de la Audiencia Nacional Eloy Velasco de prohibir la movilización original, convocada por el colectivo ‘Tantaz tanta’. Sin embargo, como principales impulsores de la marcha realizaron lecturas opuestas sobre las repercusiones del multitudinario acto. Así, mientras desde las filas jeltzales se insistió en que la unidad con la izquierda abertzale era algo «excepcional», los líderes de Sortu acogieron la colaboración en clave triunfalista.
Decisión marco de la UE
El PNV volverá a su posición histórica, la de no respaldar a nivel de partido la marcha. Desde Sare no descartan, sin embargo, que un indefinido –aunque prevén elevado– número de simpatizantes peneuvistas se sumen a la misma. La marcha se centrará este año en reclamar el fin de la dispersión, si bien es indudable que una decisión judicial de calado sobrevolará la manifestación. Y es que, apenas tres días después, está previsto que el Supremo tome una decisión sobre la decisión marco de la Unión Europea que insta a descontar de las condenas de los presos de ETA los años cumplidos en otros países.
La Sala Penal del alto tribunal decidió posponer hasta el 13 de enero cualquier decisión al respecto, después de que desde el Gobierno central tacharan de «incomprensibles» las excarcelaciones de Santiago Arrozpide Sarasola, ‘Santi Potros’, y de Alberto Plazaola, dictadas por la Audiencia Nacional. Más de medio centenar de reclusos han pedido restar de sus penas el tiempo de reclusión en cárceles francesas.