La moción de Sánchez

EL MUNDO 16/06/17
F. JIMÉNEZ LOSANTOS

DESDE el punto de vista conceptual y político, el artículo de Pedro Sánchez ayer en EL MUNDO muestra que el PSOE está dispuesto, una vez más en su larga –y a menudo siniestra historia–, «a la altura». A la del betún, claro. El renacido secretario general del PSOE finge respeto a los 40 años de democracia que se cumplían ayer, pero su artículo anuncia la unión con los que anteayer perdieron la moción de censura: Podemos, Bildu y ERC, o sea, los hijos de Chávez, los herederos de la ETA y los hospederos de Terra Lliure, cuyo propósito, explícito en el comunicado del sector Anticapitalista, es destruir el sistema constitucional español, utilizando como ariete desestabilizador el referéndum separatista catalán. No sé de qué «frustradas esperanzas» habla Sánchez a cuenta de esa moción. Sí sé que cualquiera que aprecie la democracia más que a sí mismo, sólo podía tener la esperanza de verla frustrada. Por lo visto, lo único que impidió que Sánchez sumara el PSOE a Bildu y ERC, fue que el candidato no era él.

Y lo que entreveo en su artículo es que Snchz tiene la intención de convocar enseguida otra moción de censura, en la que el candidato –que no tiene que ser diputado– vuelva a ser él. Porque lo fue el año pasado, pero Iglesias prefirió que siguiera Rajoy a permitir un Gobierno del PSOE y Cs, cuyo objetivo declarado era luchar contra la corrupción. No sólo la del PP, ojo, la de todos, empezando por el PSOE y la Famiglia Pujol.

Para ello, el primer paso era –y es– la despolitización de la Justicia. Sin embargo, lo que PP, PSOE e IU (hoy UP) han hecho hasta ahora es justamente lo contrario: politizar al máximo el CGPJ y blindar su origen partidista, es decir, su corrupción. Es cierto que el programa de Gobierno de Sánchez, por iniciativa de Rivera, planteaba como tarea urgente la despolitización de la Justicia. Y era posible. ¿Pero cómo va a luchar contra la corrupción de los partidos y de la Justicia una alianza de socialistas, comunistas y separatistas varios, cuando el plan incluye la impunidad legal de la Generalidad golpista? ¿Puede defender la Constitución el Sánchez uncido a Podemos que se proclama acomodador del separatismo catalán?

Pero esa será la excusa de su moción: echar a Rajoy para evitar el choque de trenes, es decir, tragar el referéndum y escupir la Constitución.