Del blog de Javier Elorrieta
Vaya por delante que no debieran perderse ningún artículo de los recogidos en la pag. de la Fundación para la Libertad.
Pero me he fijado con atención, además del de Fernando Savater, sobre VOX, en el de Ruiz Soroa. En el que define la expresión cuantitativa electoral como el gran problema de fondo de las derechas españolas.
Por mi parte creo que no hay solución a lo expuesto. Tal y como lo presenta Ruiz Soroa. Y es que en mi opinión, sólo la presencia del Estado, donde se diluye hasta la inexistencia del mismo, es el factor fundamental que influye en el resultado electoral de forma más evidente. Y creo que esto ya está tasado.
La posibilidad de alternativa que estuvo en un tris de producirse, con la propuesta de alternativa constitucionalista al Frente de Estella. en el País Vasco. La mayoría electoral de CS. en Cataluña, sin poder formar gobierno. Tras haber presidido el PSC con Montilla, antes, el Gobierno de la Generalidad, han mostrado que son las políticas de los partidos nacionales hacia esas partes de la España de las Autonomías las que marcan las pautas electorales. Y que ya está evidenciado.
En esta especie de regla de tres, la incógnita estaba despejada. Es la ruptura del PSOE de los Pactos con el PP. Y el posterior Pacto del Tinell para aislar al otro partido nacional. Y las concesiones al conjunto del nacionalismo, tanto el institucional por un lado, como al terrorista, por otro, en la negociación de aceptar que canalizaran con soporte legal e institucional el proyecto político que pretendían. Éstas políticas desarrolladas, su evolución, son las que a mi juicio mayores consecuencias han tenido en los resultados electorales.
Que ciertamente en su desnudez matemática ofrecen el dibujo que muestra Ruiz Soroa.
Pero jamás en la Historia reciente de España se había llegado a una extensión tan grosera de lo que vengo definiendo como anomalías políticas democráticas. Estimuladas por las políticas de ZP en un principio y hoy por lo que viene calificándose como «Sanchismo».
La alteración de los usos democráticos institucionales, Tanto los formales como los convencionales han llegado a que la búsqueda de permanencia en la Presidencia del Gobierno, no habiendo sido el partido ganador electoralmente, se vea desarrollada con una secuencia más agrandada de lo que se ha venido definiendo, por descubrimiento de Alfredo Pérez Rubalcaba, de Gobierno Frankenstein.
La permanencia en el Gobierno y el soporte parlamentario del mismo, con los enemigos confesos de España, como Nación y como Estado. Y de su articulación Constitucional. Con una formulación de confrontación polarizadora de espíritu guerracivilista. que ya Zapatero comenzó, han puesto, con indudable evidencia, que el paso que separa la línea del abismo ya la ha dado el PSOE de Pedro Sánchez. El único partidistamente existente.
Sres García Page y demás miembros del Psoe, que se dicen estar aterrados por lo que el mismo Page ha definido «como una situación diabólica».
Sepan Vds. (y creo que en el fondo lo saben) que el gran peligro para el desarrollo de la ciudadanía en libertad e igualdad en España han sido las políticas del PSOE desde el Pacto del Tinell hasta hoy. En un presente en el que Pedro Sánchez y sus políticas de alianzas con los que explicitamente desean y pugnan por la ruptura territorial, social y convivencial en España. Debieran Vds. actuar con dignidad democrática.
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