ABC – 13/06/14
· Cosidó reitera que la principal amenaza está en los yihadistas que se desplazan a Siria o Malí.
· Hasta que desaparezca La Policía sigue combatiendo a ETA hasta su erradicación, porque «mientras exista constituye una amenaza».
Ignacio Cosidó, ayer, con el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz El director general de la Policía, Ignacio Cosidó, advirtió ayer de que los anarcoterroristas han reforzado su presencia en España y podrían volver a atentar, como ya lo hicieron el pasado 2 de octubre en la Basílica del Pilar, en Zaragoza, y lo intentaron en la catedral de La Almudena, donde el artefacto fue neutralizado a tiempo.
«El terrorismo anarquista se ha implantado en nuestro país y existen riesgos de que atentados como el de la Basílica del Pilar puedan repetirse». Así que combatirlo, sentenció Cosidó, «es una prioridad para la Policía». Los autores materiales de aquella acción, una pareja de chilenos del «comando Mateo Morral», con antecedentes penales en su país, ya fueron arrestados. El protagonismo emergente de elementos anarquistas fue detectado en el conflicto de Gamonal, en los gravísimos disturbios registrados en Madrid el pasado 22 de marzo y, sobre todo, en los episodios de violencia que forzaron al alcalde de Barcelona a paralizar el derribo del centro de «okupación» Can Vies. «La lucha contra esta forma de terrorismo constituye ya una prioridad para nuestra Comisaría General de Información», declaró Cosidó durante un desayuno informativo organizado por el Executive Forum, y que contó con la presencia del ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, y del secretario de Estado de Seguridad, Francisco Martínez.
El peligro de los retornados
En cualquier caso, el director general de la Policía subrayó que la principal amenaza hoy en día para España, Europa y el resto del mundo viene del terrorismo yihadista. La posibilidad en estos momentos de una acción terrorista de los llamados «lobos solitarios» y el desplazamiento de yihadistas a escenarios de conflicto, como Malí y Siria, con la pretensión de retornar a sus países de origen, más radicalizados, «nos hacen mantener en el conjunto de la Unión Europea la guardia muy alta frente a este tipo de amenazas», advirtió.
Y también ETA, mientras siga existiendo y no entregue las armas, «seguirá siendo una amenaza inaceptable». Por ello, la Policía trabajará «sin descanso» hasta su total desaparición. Es objetivo prioritario para la Policía, enfatizó Cosidó, que España sea el lugar más seguro. En este sentido, recordó que en los últimos dos años este esfuerzo policial se ha traducido en la detención de 78 terroristas de ETA, 64 relacionados con redes yihadistas, 6 pertenecientes a grupos anarquistas, 5 de Resistencia Galega y 689 elementos radicales de diferente signo, acusados de graves disturbios.