El Parlamento iraní investiga a su presidente por un viaje de lujo a Nueva York.
Bajo el título «a lo grande», el prestigioso diario ruso Novie Izvestia publicaba ayer un artículo a cuatro columnas dedicado a las «encendidas críticas» que reciben algunos dirigentes mundiales por «su amor por el descanso a cuenta de los demás». El presidente de la Generalitat, Artur Mas, aparece como el primer ejemplo de despilfarrador citado por los dos firmantes de la información, la corresponsal en Madrid de Novie Izvestia, Natalia Timashova, y el analista internacional ruso, Serguéi Manukov.
El diario ruso Novie Izvestia criticaba en su web la visita de Mas
Novie Izvestia cita la información publicada por ABC el 3 de noviembre sobre las dos noches pasadas por Artur Mas y su esposa en una suite Ambassador del Radisson Royal y subraya que, teniendo en cuenta que el dirigente catalán no mantuvo ningún encuentro de alto nivel en Rusia, «la opinión pública española y catalana no terminan de entender, por decirlo suavemente, con qué objetivo se desplazó a Moscú en compañía de una delegación tan grande de políticos y hombres de negocios gastando enormes cantidades de dinero en los actuales tiempos de crisis».
La presencia en la capital rusa del presidente de la Generalitat pasó completamente desapercibida a la prensa local en su momento por el casi inexistente contenido político de su agenda. Pero el eco que ha tenido en España su paso por un hotel tan caro ha terminado suscitando interés.
Mas es puesto al mismo nivel en cuanto a dispendio que el presidente iraní, Mahmud Ahmadineyad. Se trata del primer material que se publica en la prensa rusa sobre el resultado del controvertido viaje a Moscú del presidente de la Generalitat, efectuado a comienzos de noviembre y en el que se alojó en el hotel de súper lujo Radisson Royal.
Los autores del artículo hacen referencia al «debate» existente en los medios españoles como consecuencia del «sonoro escándalo» surgido a raíz del «paseo» que se dio Mas por la capital rusa «a cuenta del Estado». El rotativo ruso califica de «extremadamente desafortunado» el momento en el que ha saltado la polémica, ya que las elecciones catalanas están a tiro de piedra.
En alusión a Ahmadineyad, el periódico ruso sostiene que Mas tiene el consuelo de no ser el único responsable político que «pierde el sentido de la cautela y decide gozar a lo grande en el momento menos oportuno para su carrera».
Manukov cuenta que gran parte del séquito de Ahmadineyad se alojó en el lujoso hotel Warwick, «en donde los precios pueden alcanzar los 1.600 dólares diarios». «Los detractores del presidente iraní aseguran que la gran mayoría de los miembros de la delegación fueron a Nueva York no a trabajar, sino a descansar a cuenta del erario público».
Otro escándalo que cita la publicación rusa es el acaecido con el director financiero del Ministerio de Sanidad de la provincia canadiense de Alberta, Allaudin Merali, que tuvo que abandonar el cargo justo cuando iba a ser ascendido.
Rafael M.Mañueco / Moscú ABC 10/11/12