La presencia de víctimas policiales en las aulas enfrenta a la oposición

EL CORREO 06/02/14

· El PSE pone en valor su testimonio, mientras que el PP advierte que el programa creará «confusión» y alentará la «teoría del conflicto».

La decisión del Gobierno vasco de llevar el testimonio directo de las víctimas de abusos policiales a las aulas enfrentó ayer a los partidos de la oposición. Mientras EH Bildu y el PP se mostraron contrarios a su presencia en las aulas, aunque por diferentes motivos, desde el PSE defendieron este programa para que las nuevas generaciones sepan «el horror que ha existido y que no puede volver a repetirse».

No es la primera vez que esta iniciativa, recogida en el plan de paz, despierta los recelos de las formaciones políticas. Ya en noviembre, cuando el Ejecutivo presentó las bases de este proyecto, su portavoz, Josu Erkoreka, se vio obligado negar «objetivos aviesos u ocultos» en el programa, cuyo fin, añadió entonces, es sensibilizar a los escolares en «la cultura de la paz y la convivencia». En esta ocasión, quienes cruzaron opiniones al respecto fueron los partidos de la oposición.

Así, si ya la víspera la coalición abertzale tildó de «error» la presencia de las víctimas –ya fuesen de abusos policiales como del terrorismo– en los colegios vascos y advirtió de la necesidad de un «consenso» previo sobre la «violencia política», su portavoz parlamentaria, Laura Mintegi, ahondó ayer en esta idea al remarcar que el programa es «un poco forzado».

Las declaraciones de EH Bildu encontraron rápida respuesta en la socialista Isabel Celaá. Exconsejera de Educación y una de las impulsoras de los testimonios directos de las víctimas en las aulas en la pasada legislatura, consideró «un error grave» que la coalición rechace un programa que supone un «acercamiento directo» de las nuevas generaciones al «horror» que ha existido en Euskadi para que «no vuelva a producirse».

Celaá, que durante su mandato dejó abierta la puerta a la presencia de las víctimas de abusos policiales en las aulas, en cuanto fueran reconocidas institucionalmente –el Gobierno de Patxi López aprobó el primer decreto para resarcir a estos damnificados–, se mostró a favor del paso dado por el Ejecutivo. «La escuela –subrayó– es el único espacio público organizado para educar en valores». Sostuvo, en esta línea, que la postura de EH Bildu al justificar su rechazo porque «no existe un consenso» al respecto carece de base alguna. «Por esa regla de tres, no se podría educar a los niños contra la xenofobia ni contra el racismo porque también hay fuerzas que defienden el racismo», manifestó.

«Paseo democrático»

La parlamentaria del PSE se congratuló de que, «afortunadamente, el grueso central de la política estamos a favor» del testimonio directo de los damnificados «porque hemos visto la evolución positiva» del programa. «Hablamos de víctimas educadoras; no son políticas, son prepolíticas y lo que enseñan son los valores de la paz y el respeto a los derechos humanos», añadió.

Celaá recordó que, frente a su negativa a este proyecto, la coalición soberanista sí apoya que las mujeres víctimas de malos tratos relaten su experiencia en las aulas. «¿Qué hay en el fondo de esta cuestión?», se preguntó. «El motivo de que EH Bildu esté en contra de este programa es que tiene que darse todavía un paseo democrático», apostilló, en relación a la iniciativa relacionada conlos damnificados por el terrorismo.

El PP vasco también fue especialmente crítico con la presencia directa en los colegios de personas que han sufrido abusos policiales por una motivación política. Su secretario general, Iñaki Oyarzábal, tildó de «absurdo» este paso puesto que «no existe un caldo de cultivo que justifique la tortura ni ese tipo de prácticas», al contrario que «con el terrorismo». A su juicio, el testimonio de los damnificados por abusos policiales solo «creará confusión» y alentará «la teoría del conflicto». Una postura que también ha defendido UPyD. Su parlamentario, Gorka Maneiro, llevará hoy este debate al pleno de la Cámara vasca.

También desde el Colectivo de Víctimas del Terrorismo de Euskadi rechazaron el programa. Su vicepresidenta, Laura Martín, viuda de Juan Carlos García Goena, asesinado por los GAL, alertó de que se «equiparará a quienes fueron perseguidos de forma sistemática por organizaciones terroristas que ejercieron el asesinato selectivo y a quienes sufrieron abusos puntuales por parte de las fuerzas de seguridad». Una situación, añadió, que «conducirá a la manipulación de la percepción de los jóvenes vascos» respecto a lo ocurrido en Euskadi.

EL CORREO 06/02/14