EL MUNDO – 10/06/16
· El PSOE se desploma hasta 80 diputados y Podemos se afianza como segunda fuerza.
· El PP ganaría las elecciones con más votos pero perdería entre dos y cinco escaños.
· Ciudadanos se mantiene como cuarta formación y no podría gobernar sólo con el PP.
Unidos Podemos, segundo, y el PSOE ante la decisión histórica de permitir que gobierne Mariano Rajoy o que lo haga Pablo Iglesias. La encuesta preelectoral del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) certificó ayer que la política española se encamina hacia una nueva situación ingobernable. El PP volvería a ganar las elecciones (29,2%), pero podría perder entre dos y cinco escaños. En el segmento del centro derecha los votos apenas aumentan. Ciudadanos (14,5%) sobreviviría, pero estaría muy lejos de conformar un Gobierno con el PP. La situación para ambos empeora. El cambio se produce en la izquierda.
La fusión de Podemos e IU, más todas las confluencias territoriales, se convierte en la adición perfecta
Escalan del 22,6% al 25,6% que ayer le otorgó el CIS. Tres puntos más, que en la práctica supone la suma del 3,6% de sufragios que IU consiguió el 20-D. Donde realmente les bendice la aritmética es en el reparto de escaños. Con un 25,6% y el segundo puesto, Unidos Podemos saca petróleo de la Ley d’Hondt y hunde políticamente al PSOE. Según el CIS, Iglesias puede lograr entre 88 y 92 diputados. Los socialistas, con un 21,2% de apoyo, bajan hasta entre 78 y 80 escaños. Juntos se acercarían a la mayoría absoluta.
La combinación de Unidos Podemos y PSOE se quedaría a 10 parlamentarios de la mayoría absoluta en la peor de las estimaciones del CIS (166 parlamentarios). En la mejor (172), sólo a cuatro. PP y Ciudadanos, en cambio, no alcanzan a ver la gobernabilidad. Los populares mejoran levemente (del 28,7% al 29,2%) pero bajan en número de escaños. La horquilla que pronostica el CIS es de entre 118 y 121 diputados. Esto supondría perder entre dos y cinco parlamentarios.
Pese a lo que se ha especulado con su caída, Ciudadanos resiste con un 14,6% (en diciembre logró un 13,93%) aunque puede perder uno o dos escaños. En la previsión más optimista, PP y Ciudadanos no se acercan a la posibilidad de formar Gobierno, al poder conseguir sólo entre 156 y 160 escaños. Totalmente insuficiente. Con el agravante para ellos de que el voto de fuerzas independentistas ya no es tan necesario para una alternativa de izquierdas como lo era en diciembre.
Como sucedió el 20-D, la posición del PSOE vuelve a ser determinante. Pero en esta ocasión la decisión afecta a su propia supervivencia. Si se cumplen las previsiones del CIS, ¿qué harán los socialistas? ¿Abstenerse y permitir que gobierne Rajoy o participar en un Ejecutivo en el que Pablo Iglesias sería el presidente? En ambos casos hay cierto consenso de que supondría su desaparición definitiva. En esta tesitura, la posibilidad de que el PSOE no apoye ninguna de las dos opciones ha vuelto a hacer emerger el fantasma de la ingobernabilidad y de unas terceras elecciones.
Desde el punto de vista socialista, respaldar a Rajoy podría resultar letal. No sólo se trataría de permitir su investidura. Según el panorama que dibuja el CIS, sus votos serían indispensables para aprobar cualquier ley que el PP remitiera al Congreso. Y Rajoy ya ha dicho que quiere un Gobierno estable, con opciones de permanecer cuatro años, aunque para ello tenga que ceder sitio a otros partidos en el Consejo de Ministros.
La otra alternativa del PSOE sería integrarse en un Gobierno presidido por Iglesias. Una opción que tanto dentro como fuera del partido se considera también una liquidación definitiva. En estas circunstancias, quienes pensaban que sería imposible repetir por tercera vez elecciones ya no lo consideran tan improbable.
Al relato definitivo le falta la confirmación del 26-J. Otra vez el número de indecisos es tan alto que pueden decantar el resultado. El 71% de los españoles acudirá a votar y un 8,5% no lo hará. Pero el 32,4% de los que admiten que irán a las urnas no ha decidido aún a quién apoyar. Suponen un tercio del total.
Las dudas son muy diversas. Un 10% de los que dicen no saber qué harán vacila entre PP y Ciudadanos; un 9,4% entre PP y PSOE; un 8,9% entre PSOE y Ciudadanos, y un 7,5% entre PSOE y Podemos. La encuesta del CIS se asienta sobre 17.488 entrevistas y fue realizada entre el 4 y 22 de mayo. Respecto a las fechas contiene una ligera tara: el acuerdo entre Podemos e IU se cerró el 9 de mayo. El sondeo del CIS ya llevaba unos días en marcha.
El PP defendió ayer que este trabajo de campo está «desfasado» y aseguró que en algunas provincias la distribución de escaños es «imposible». Fuentes populares lo atribuyen al escaso margen en el que se decidirán algunos diputados. Hasta ocho están en dura pugna entre el PP y Unidos Podemos. Pese a los fallos, en Génova admiten que Iglesias «se está comiendo» al PSOE y que la polarización de la campaña entre ellos y Podemos es «una realidad».
El efecto del CIS lo certifica. Ahora habrá que comprobar también sus consecuencias. Si el ascenso de Podemos al segundo puesto –tras ganar entre 17 y 21 escaños, según el CIS– tiene un efecto llamada para el votante de izquierdas o a quien moviliza es en cambio al elector de centroderecha. O las dos cosas.
En todo caso, se hunde la idea de que la coalición con IU y su identificación como una fuerza claramente de izquierda, con bases comunistas, podría pasar factura a Podemos el 26-J. Al contrario, el partido mantiene su carácter transversal entre el votante de entre 18 y 25 años.
Mientras, en las grandes ciudades la nueva política vuelve a ganar peso. Unidos Podemos suma en Madrid los dos escaños que tenía IU. El PP perdería un diputado que pasa a Ciudadanos. El PSOE sigue como cuarta fuerza con seis parlamentarios.
En Barcelona, el crecimiento de En Comú Podem resulta espectacular y gana dos escaños. Puede llegar a entre 14 y 15 diputados en toda Cataluña. La gestión no penaliza a los llamados ayuntamientos del cambio. En Valencia, Compromís mantiene los cinco escaños, aunque el PP desempata al conseguir el nuevo diputado que está en liza en la provincia.
Por comunidades, el CIS confirma la consolidación del sorpasso de Unidos Podemos al PSOE en Cataluña, Madrid, Comunidad Valenciana, Galicia, Navarra, País Vasco, Canarias y Baleares. En estas últimas dos autonomías los socialistas habían superado a Iglesias el 20-D. En el País Vasco, Unidos Podemos se impone al PNV en número de escaños, tras hacerlo ya en votos el 20-D. En Baleares, la formación de Iglesias disputa la victoria directamente al PP.
En Andalucía, el PP mejora sus resultados y está empatado a escaños con el PSOE. En territorio de Susana Díaz, Pablo Iglesias se alza con tres diputados más. El líder de Podemos advirtió ayer al PSOE de que si se cumple el resultado del CIS, la noche del 26-J llamará a Pedro Sánchez para proponerle ser su vicepresidente.
EL MUNDO – 10/06/16