ABC 27/06/13
· El líder de CIU, forzado a dialogar con Rajoy tras la firma del Pacto por el derecho a decidir.
El presidente catalán, Artur Mas, se ha visto forzado a dialogar con el Gobierno español, tras la firma del Pacto por el Derecho a Decidir celebrada ayer en el Parlamento autonómico, donde los asistentes instaron al líder de CiU a negociar la celebración de la consulta prevista para 2014 con el presidente Mariando Rajoy. Hasta ahora, el Gobierno nacionalista era reacio a pedir ese diálogo, pues daba por hecho el «no» del Estado. Mas enviará en los próximos días una carta a Rajoy en la que le pedirá formalmente la celebración de la consulta.
Al encuentro asistieron partidos políticos (CiU, ERC, ICV, CUP, Reagrupament y Nova Esquerra, liderada por el exconsejero socialista Ernest Maragall), así como representantes del sector empresarial, como las cámaras de comercio, pequeñas y medianas empresas, Cecot; los sindicatos CC.OO., UGT y USOC, y entidades municipalistas, diputaciones, Òmnium Cultural o Asociación de Municipios por la Independencia. PP, PSC y Ciutadans no participaron en el encuentro. Tampoco lo hizo la patronal Fomento del Trabajo. Curiosamente, un miembro de la Ejecutiva del PSC perteneciente al sector crítico, Fabian Mohedano, asistió como representante del Movimiento Laico Progresista. El presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, lamentó la «performance» de Mas, mientras que la líder del PP catalán, Alicia Sánchez-Camacho, le acusó de utilizar el Parlamento para sus fines secesionistas.
«Solución final»
Aunque según el consejero de Presidencia, Francesc Homs, hubo un «común denominador» consistente en la defensa del derecho a decidir el futuro de Cataluña, hubo discrepancias sobre «la solución final» de la transición nacional. En este sentido, el Consejo de Cámaras de Comercio de Cataluña (un total de 13) fue la más combativa en el terreno de la legalidad. Su presidente, Miquel Valls, tomó la palabra para avisar de que esa transición nacional «puede tener consecuencias económicas muy importantes para las empresas catalanas con actividad con el resto del Estado, como socias, clientes o proveedores». Añadió que «el principal riesgo es la incerteza que pueda paralizar las decisiones de inversión en un momento en que las empresas necesitan seguridad jurídica y un cierto grado de estabilidad por lo que respecta al contexto político».
Por ello, las cámaras defienden la vía del diálogo con el Estado «como la mejor manera de ejercer el derecho a decidir del pueblo catalán» y afirman que cualquier escenario de futuro «solo es concebible en el marco de la UE, con la plena unión fiscal y política». El Pacto por el derecho a decidir está incluido en el acuerdo de legislatura firmado por CiU y ERC, como lo están la Declaración de Soberanía aprobada por el «Parlament» y la creación de un Consejo Asesor de la Transición Nacional. El presidente de este órgano, Carles Viver Pi Sunyer, compareció en la Comisión de Asuntos Institucionales de la Cámara catalana para explicar las cinco vías legales posibles para poder convocar la consulta. El exvicepresidente del Tribunal Constitucional advirtió de que, si no se puede seguir el cauce legal, la Generalitat podría usar otras vías «en las que el derecho tiene poco que decir», abriendo la puerta, sin citarla, a una declaración unilateral de independencia.
Concierto secesionista
Por otro lado, la maquinaria mediática de Mas sigue al servicio de su soberanismo y, en pleno proceso de recortes laborales, TV3 y Catalunya Ràdio retransmitirán en directo el sábado el «Concert per la llibertad», organizado por la entidad independentista Òmnium Cultural en el estadio del Camp Nou. Acudirán miembros del Gobierno catalán, pero no Artur Mas, porque se casa su hija en Menorca.
ABC 27/06/13