EL CORREO 13/05/13
El foro parlamentario reanuda hoy sus trabajos con la duda de si la izquierda abertzale asumirá el ‘suelo ético’ de la pasada legislatura
La ponencia de paz y convivencia afronta hoy una jornada que puede determinar el futuro de este foro, envuelto en la polémica desde antes de su constitución la pasada legislatura. Las reticencias de EH Bildu a aceptar el llamado ‘suelo ético’ pactado por la mayoría de los partidos hace un año puede dejar el encuentro en un punto muerto ante la negativa del PSE a seguir avanzando si la coalición abertzale no deja claras cuáles son las bases sobre las que quiere trabajar. Ese ‘suelo ético’ apostaba, entre otras cuestiones, por la memoria como «herramienta esencial» para la deslegitimación del terrorismo,Los encuentros de la ponencia arrancaron el pasado 11 de abril con la ausencia del PP y UPyD, muy críticas con la posición de la izquierda abertzale. Sin embargo, la primera reunión ‘operativa’ no fue hasta casi tres semanas después, el día 30. Y tampoco hubo muchos avances. PNV, EH Bildu y PSE apostaron por fijar «unos principios compartidos», se intercambiaron documentos y quedaron en verse hoy para fijar la metodología.
La cuestión es que, más allá de esa buena voluntad, las discrepancias a la hora de enfocar la labor de este organismo y establecer el punto de partida pueden hacerlo naufragar casi desde su inicio. El problema, al menos para los socialistas, es la pretensión de la izquierda abertzale de incidir en el tema de los presos. El texto que EH Bildu trasladó hace quince días a sus interlocutores dejaba bien claro que la modificación de la política penitenciaria para los presos de ETA tenía que ser uno de los temas «prioritarios» de este foro, junto con la búsqueda de una memoria «completa», la asunción de responsabilidades por parte de «todos» y la construcción de la convivencia desde la «no imposición».
El foco, en los presos
El interés de EH Bildu en poner el foco de atención en los presos no es nuevo, ya que la izquierda abertzale no oculta su malestar ante los escasos pasos que está dando el Gobierno central para mejorar las condiciones de los reclusos de ETA. Pero esta estrategia es vista con recelo desde el PNV y el PSE. Las dos formaciones, aunque con matices, coinciden en que el Ejecutivo del PP podía haber flexibilizado la política penitenciaria para evitar que los sectores más radicales de la izquierda abertzale refuercen el discurso del victimismo y del «bloqueo» por parte de Madrid. Incluso, tampoco tienen problemas en que la ponencia aborde la cuestión de los presos.
Pero los socialistas quieren tener claro que EH Bildu defiende el «suelo ético» de la pasada legislatura, que rechazaba de forma clara los asesinatos de ETA. La opinión de la formación liderada por Patxi López es que no tiene mucho sentido seguir conversando si la izquierda abertzale no aclara su posición. «De lo que se trata es de que ellos se acerquen a los planteamientos del resto de partidos, no que nosotros rebajemos el listón ético para satisfacerles», sostienen desde el PSE. El PNV, por su parte, está dispuesto a mantener una posición más flexible, no ve «necesario» volver a emplazar a EH Bildu a asumir el contenido íntegro del acuerdo de la pasada legislatura y prefiere ver cómo evolucionan las reuniones, pero sin rebajar la exigencia a la izquierda abertzale.
Los antecedentes tampoco invitan al optimismo. En teoría, la ponencia tenía que haber arrancado a mediados de marzo, pero la presidenta del Parlamento vasco, Bakartxo Tejeria, decidió posponer su constitución después de que Laura Mintegi calificase de «políticos» los asesinatos de ETA, lo que provocó la ira del PNV y PSE, y reforzó los argumentos del PP, que unos días antes ya había comunicado que no pensaba asistir al mantener sus recelos hacia la izquierda abertzale.