EL CORREO 20/02/14
· Mas confiesa que el diálogo con Rajoy es imposible porque exige la retirada previa del referéndum.
Ocho meses después de su constitución, el Pacto Nacional por el Derecho a Decidir, uno de los instrumentos con los que Artur Mas quiere implicar a la sociedad civil en el proceso soberanista, celebró ayer su segunda reunión, la primera con contenido real. Los asistentes coincidieron en la idea de que el problema de Cataluña sólo se resuelve votando en un referéndum, y no con soluciones intermedias.
Al pacto se han adherido ya unas 1.600 entidades de todo tipo, de las que poco más de medio centenar, entre ellas los cuatro partidos que impulsan la consulta, sindicatos, organizaciones sociales y culturales, las patronales Cecot y Pimec o el Consejo de Cámaras de Comercio de Cataluña, acordaron en el encuentro con el presidente de la Generalitat movilizarse a favor de la consulta y establecer unos criterios de actuación en defensa del referéndum. La mayoría de los que integran este foro comparten que esa consulta tenga lugar el próximo 9 de noviembre.
Las entidades consensuaron una especie de manual de instrucciones sobre cómo actuar a partir de ahora, con el que pretenden visualizar que el apoyo a la consulta es mayoritario y con el que tratarán además de ampliar la masa crítica. Un respaldo que va del 64% al 80% en el Parlamento catalán, según si se incluye o no al PSC, que no está en el pacto, pero es favorable a una consulta legal y acordada.
La idea de las entidades soberanistas es trasladar la imagen de que hay una gran «movilización ciudadana» a partir de un plan de actividades que organizará cada una de ellas. La consigna es que todos estos actos ofrezcan una imagen amable del soberanismo y no ataquen a España. Así, deberán estar centrados en el derecho a decidir, sin pronunciarse sobre el sí o no a la independencia, reafirmar que el proceso no divide y organizar actividades en positivo. Plantear las iniciativas con civismo, pedagogía, manteniendo un alto nivel de cultura y sin caer en la vulgaridad. No lo dicen, pero de alguna manera quieren otorgar el papel de malo de la película al Gobierno central, que es, a su juicio, el que divide a la sociedad con mensajes catastrofistas.
Sant Jordi lleno de banderas
De momento, ya hay un acto convocado. Lo anunció el máximo representante del Pacto Nacional por el Derecho a Decidir, el democristiano Joan Rigol, que emplazó a la ciudadanía a que el próximo 23 de abril, día de Sant Jordi, se produzca un «estallido de senyeras» por toda Cataluña. El expresidente del Parlamento autonómico invitó a todos los ciudadanos a llenar de banderas catalanas las ventanas y balcones de los edificios para visualizar su deseo de votar en una consulta.
En el aire queda saber si las entidades que integran el pacto convocarán una gran movilización el día que se formalice el no del Gobierno de Mariano Rajoy al referéndum. De hecho, la Asamblea Nacional Catalana lleva meses amagando con un acto de impacto para el próximo 11 de septiembre.
El rechazo del Ejecutivo central se da por descontado y lo admite el propio Mas que, según relató Rigol en el encuentro, dio por imposible el diálogo sobre el referéndum con el Gobierno del PP. El presidente de la Generalitat comunicó a los asistentes que Rajoy ha puesto como condición para sentarse a hablar que retire la consulta. Y como es sabido que no lo va a hacer, los contactos al más alto nivel no se producirán, a pesar de que los empresarios que participaron en el encuentro volvieron a reclamarle diálogo, como lo hicieron en días anteriores las patronales CEOE, Fomento o la APD.
Existe inquietud entre la patronal por el proceso soberanista, así que el consejero de Economía catalán, Andreu Mas-Colell, pidió ayer calma a los empresarios porque «no daremos ningún paso que nos deje fuera de Europa».
EL CORREO 20/02/14