ABC 07/04/17
· «ETA ya es una organización desarmada», reconoce la banda terrorista en un comunicado
Desde la página 1 Las Fuerzas de Seguridad mantienen un cierto «escepticismo» sobre el desarme de ETA, anunciado para mañana en Bayona (Francia). De hecho, fuentes de la lucha antiterrorista consultadas por ABC aseguran que hay «improvisación» en la actuación de los «artesanos de la paz», que se sienten muy presionados por la actuación de los distintos Cuerpos policiales y servicios de inteligencia, españoles y franceses. Esta circunstancia ha hecho que muy probablemente hayan perdido el contacto con la organización terrorista en los últimos tiempos.
Es más; es difícil saber con quién ha tratado esta gente, ya que la auténtica cúpula de ETA está en prisión, desactivada y sin capacidad de maniobra y fuera de ella solo queda un grupito de liberados sin preparación ni estructura. Algunas fuentes sitúan como cabecilla de ese grupo a Mikel Barrios, que formó parte de Segi. Este individuo habría sucedido a Mikel Irastorza, detenido en noviembre. Es aventurado pronosticar qué grado de control puede tener un individuo como él sobre la localización de los zulos.
Sería este grupo quién habría remitido anoche a la cadena pública británica BBC un comunicado en el que se reconoce la derrota y se afirma que la banda «ya es una organización desarmada», pues «las armas y explosivos que tenía bajo su control se encuentran en manos de la sociedad civil».
Ahora, la gran cuestión a dilucidar, según las fuentes consultadas, es si ese desarme va a ser total, o simplemente es otra mascarada como la que protagonizaron en febrero de 2014 en Burdeos con la complicidad de sus «verificadores internacionales». Por entonces la banda escenificó un supuesto abandono de un pequeño lote de armas y explosivos, que previamente había inutilizado. Después, para colmo, los encapuchados se llevaron el material. El ridículo de esos «verificadores» alcanzó proporciones grotescas.
«Tomadura de pelo»
Si, como publicó un rotativo, la banda apenas entrega medio centenar de pistolas –solo de las robadas en Vauvert quedan sin localizar entre 130 y 140– «sería una tomadura de pelo», en palabras de fuentes antiterroristas. Y sobre el posible material para hacer explosivos que pueda quedar tampoco hay demasiada preocupación, «porque con toda probabilidad ya no está en condiciones de ser utilizado». El nitrato es una sustancia que ya estará caducada y la conservación del polvo de aluminio es muy compleja.
Hay, en cualquier caso, un dato que no se puede olvidar. Es muy posible que ni siquiera los terroristas se acuerden de la localización exacta de cada uno de los zulos, por lo que es materialmente imposible que puedan entregar todas las armas. Habrá que ver, asimismo, su procedencia, si se trata de material moderno o de «reliquias» guardadas desde hace decenas de años, como pueden ser los viejos subfusiles o las pistolas Stein tan utilizadas en aquellas épocas de sangre y plomo. Sí parece claro que ninguna de ellas habrá sido utilizada en atentados, aunque obviamente las Fuerzas de Seguridad comprobarán todas y cada una.
De lo que no cabe duda es de que a la banda le «quemaban» las armas y que sospechaba, probablemente con algo de razón, que casi todos, o al menos buena parte de sus zulos estaban controlados por las Fuerzas de Seguridad. De hecho, el pasado mes de diciembre la Guardia Civil y las autoridades francesas detuvieron a cinco «artesanos de la paz» e intervieron un depósito de ETA en Francia con numerosas armas, explosivos y material para hacer bombas que se iba a usar para «una acción propagandística de entrega de armas». Los arrestados explicaron que iban a proceder a la destrucción de un primer stock que equivalía al 15% de los arsenales «sellados».
En realidad, según las fuentes consultadas, estos «artesanos de la paz» no son más que un grupo de individuos que siempre se han movido en el entorno proetarra y que ahora son instrumentalizados por ETA para esta gran operación propagandística de desarme. «Como siempre han hecho, los terroristas intentan sacar rédito político», añaden las fuentes.
La «improvisación» que perciben las Fuerzas de Seguridad se nota hasta en la organización de los actos del sábado. Hasta se ha abierto una recogida de fondos para pagar los gastos de la jornada. También se desconoce cómo se escenificará la entrega de armas, que obviamente se hará en varios puntos fuera de Bayona. Podría ser a través de una misiva a la Fiscalía de Pau con las coordenadas de los zulos. Si es así, se enviará la información de inmediato a la de París al ser la competente en asuntos de terrorismo y que ordenará la apertura de los mismos lo más rápidamente posible.