BIEITO RUBIDO-EL DEBATE
  • Lo que ayer Paco Vázquez transmitió a los catalanes y a los españoles fue un mensaje de valentía. Vino a decir aquello que los ciudadanos no escuchan a los políticos
Entre las voces más firmes –a la vez que emocionante–de la manifestación de ayer estuvo, sin duda, la de Paco Vázquez, el histórico alcalde socialista de La Coruña –ciudad que vive todavía hoy de su herencia– y embajador de España cerca de la Santa Sede.
En su potente y notable intervención, Vázquez hizo una pregunta fundamental que Sánchez responde, como siempre, con un engaño: ¿Para qué quieren la amnistía? Y el mismo respondió: unos para escribir un capítulo más de un proyecto de ruptura física, territorial y emocional de España. El otro para seguir en el poder, aunque se juegue el futuro de España, que no es propiedad de él, sino de todos nosotros. Por cierto, no acepten que les digan que los españoles votaron que siguiese Sánchez: mentira. Los españoles votaron mayoritariamente al centro derecha, la izquierda extrema y la extrema izquierda se quedaron muy lejos de una mayoría y cinco partidos anticonstitucionalistas, de dudosa fe democrática, con apenas un millón y medio de votos, se convirtieron en llave. Pero eso no quiere decir que este país haya votado PSOE, como pretenden algunos.
«La ética, y no otra cosa, es la que tiene que justificar el fin que se persigue», dijo ayer Paco Vázquez en su valiente alocución. La ética en este caso es el armazón moral, el bien superior de garantizar que todos los españoles somos libres e iguales, y esos millones de españoles, la denominada mayoría silenciosa, como dijo Paco ayer en Barcelona, ha dejado de serlo, para proclamar su protesta enérgica. El autócrata que ocupa la Moncloa no prestará oídos a este clamor popular, a la aflicción de la patria. Pero su sordera y su cinismo se le volverá en contra. Está preocupado por cómo va a pasar la historia: ¿Por mover unos huesos de un lado a otro? No creo. ¿Por llevar a España al abismo? Seguramente, pero en la página negra.
Para tratar de reducir la trascendencia de la manifestación de ayer, la izquierda extrema –PSOE y PSC– los independentistas y la extrema izquierda comunista –conviene ser preciso con las expresiones y sus contenidos– van diciendo por ahí que esta fue una manifestación de la derecha y la extrema derecha. Sus terminales mediáticas se encargarán de ampliar esa manipulación, pero lo cierto es que allí estaban personas de toda estirpe ideológica. Vázquez lo dejó claro: «Aquí caben Maura y Azaña», es decir aquí está la derecha de siempre y la izquierda histórica.
Lo que ayer Paco Vázquez transmitió a los catalanes y a los españoles fue un mensaje de valentía. Vino a decir aquello que los ciudadanos no escuchan a los políticos. Lo hizo sin complejos. El que fuera gran dirigente socialista les hablo a los que pisan la calle, en ese territorio común en el que escuchan a sus vecinos. Justamente lo que nunca oyen a los políticos.