Nicolás Redondo-Editores
1)El problema no fueron os alborotadores. El gran problema es que los valencianos han perdido la confianza en la clase política. Sabían que habían sido postergados por el miedo de los políticos autonómicos a quedar opacados por el gobierno Sánchez y por éstos, entretenidos en su okupación de RTVE y analizando otras posibles ventajas partidarias.
2) El Rey dignificó su responsabilidad y dejó claro que el gobierno puede fallar pero el Estado sigue existiendo. El barro en el rostro de los reyes, la tranquilidad que mostraron será una imagen imperecedera , que dió confianza y esperanza a los que las necesitaban.
3) El presidente nunca debió abandonar al jefe del Estado : primero el rey , después el presidente, el presidente debió ser el último en abandonar aquel dantesco escenario. En esas circunstancias el presidente representa al gobierno y el Rey al Estado.
4) El operativo de seguridad de la comitiva no exitió . La responsabilidad del desastre operativo corresponde a Marlaska. El ministro debe dimitir por dignidad; si no lo hace, el presidente debería cesarlo por necesidad .
Lo peor que podría suceder sería que los acontecimientos de Paiporta no tuvieran consecuencias. Lo peor es que no suceda nada, nos mostraría una clase política sorda y ciega.