La coalición independentista deja claras sus prioridades en la constitución del Ayuntamiento del municipio guipuzcoano, impidiendo el acceso a los informadores y sustituyendo la enseña nacional por una pancarta en favor de los presos.
Sin bandera de España y sin periodistas. Así le gusta a Bildu que esté el Ayuntamiento de Lizarza, el municipio guipuzcoano que desde hoy controlan, para inquietud de los muchos que creen que con Bildu ETA vuelve a las instituciones.
Las primeras acciónes de «gobierno» de la coalición han sido vetar la presencia de los informadores en el pleno de investidura y retirar la bandera de España que la anterior alcaldesa, Regina Otaola, del Partido Popular hizo instalar en el balcón del edificio municipal. Ahora, en lugar de ondear la enseña nacional, lo que puede verse es una pancarta que exige el retorno de los presos de ETA al País Vasco.
Bildu sucede al Partido Popular como fuerza gobernante en el municipio guipuzcoano, feudo tradicional de la izquierda denominada abertzale. La sentencia del Tribunal Constitucional que declaró legal a Bildu permitió a la coalición presentarse a las elecciones, en las que obtuvo en Lizarza un respaldo masivo, superior al 80% de los electores y que le garantiza los siete concejales del Consistorio.
El «apagón» informativo impuesto por la nueva formación al mando del Ayuntamiento ha impedido que de la investidura de hoy haya trascendido nada más que los dos «gestos» en el balcón consistorial. La decisión del nuevo equipo municipal supone una nueva vulneración de la ley que regula el uso de la bandera nacional, que reza que «la bandera de España deberá ondear en el exterior y ocupar el lugar preferente en el interior de todos los edificios y establecimientos de la Administración central, institucional, autonómica provincial o insular y municipal del Estado».
Por otra parte, la prohibición del acceso a los periodistas ha motivado una queja de la Federación de Asociaciones de Periodistas de España (FAPE) y de la Asociación de Periodistas Vascos (APV). La FAPE ha emplazado en un comunicado a Bildu a que aclare si respalda la decisión de vetar a los periodistas.
ABC, 12/6/2011