El lehendakari destaca que no se puede «ocultar la verdad» con «circunloquios» y que hay que llamar «asesino al asesino»
Patxi López defendió ayer el papel de las víctimas del terrorismo y su memoria, y lanzó un mensaje de advertencia a la izquierda abertzale. Reclamó que no se «cierre en falso» medio siglo «de dolor sin una mínima autocrítica por parte de quienes han ejercido la violencia y de quienes la han acompañado en ese camino». Y por este motivo defendió que la «verdad» sobre los asesinatos de ETA no se intenté ocultar con «circunloquios» como sucede al hablar «de todo tipo de violencia», una expresión habitual entre los políticos independentistas
El lehendakari hizo estas declaraciones durante la clausura de la Conferencia Internacional sobre Víctimas del Terrorismo que se está desarrollando en San Sebastián, y a la que asisten cerca de 200 expertos internacionales. En este contexto, defendió el recuerdo de los damnificados y señaló que, sobre él, hay que edificar «un país decente», ya que de lo contrario «nunca» se acabará con la «gran mentira sobre la que se construyeron un millar de muertes».
A su juicio, «no puede ser» que se hable de «expresiones del conflicto, de refugiados políticos, de todo tipo de violencia» o de «víctimas de los dos lados», es decir, que se recurra a «circunloquios», para intentar «ocultar la verdad de los asesinatos y minimizar el daño causado, abriendo rendijas por las que dejar entrar la justificación de la estrategia totalitaria» de la banda terrorista.
López destacó que «hay que señalar el lugar donde se cometieron los crímenes, llamar asesino al asesino, no adjetivar la muerte, ni contextualizar el crimen». «Las víctimas son y deben seguir siendo memoria del drama vivido y el pilar sobre el que levantar nuestra convivencia futura», añadió el lehendakari, quien, sin embargo, puntualizó que a los afectados por la violencia etarra no les corresponde la «responsabilidad» de «emitir una sentencia» ni tampoco «decidir si perdonan o no al victimario». A su juicio, «arrojar sobre sus espaldas el peso de esa decisión supone casi tanto como volver a atentar» contra ellas.
Durante su intervención, el presidente del Gobierno vasco aludió a lo sucedido desde la constitución de los ayuntamientos. Recordó unas «amenazas» que demuestran que todavía «hay quien ejerce una violencia intolerable» y que a la izquierda abertzale le queda «camino por recorrer».
«Que desaparezca»
Tras calificar de «inaceptable» la mera existencia de ETA, reclamó «verdad, justicia y democracia para no olvidar lo ocurrido, construir una convivencia en libertad y reparar el daño causado por los más de 800 atentados perpetrados» por la banda terrorista, que está «a las puertas de su final».
Además, en una entrevista en la cadena Cope, López aseguró que su Ejecutivo tiene «más sentido que nunca» tras las elecciones del 22 de mayo. «Hemos conseguido trasladar una tranquilidad y normalidad a la vida política y social evidente», resaltó el lehendakari, quien añadió que, «cuando vemos que otra vez se empiezan a acumular fuerzas nacionalistas, recobra mucho más sentido un gobierno que respeta la diversidad de las identidades y la pluralidad de las ideas».
López insistió en que, si bien Bildu es una formación «legal», todavía tiene «un recorrido democrático por hacer». La coalición soberanista debe «posicionarse» sobre «las amenazas, insultos e imágenes lamentables» que se han producido en los últimos días en Euskadi, señaló. «Y, sobre todo, tiene que ponerse definitivamente a trabajar para que ETA desaparezca porque su existencia en sí misma es una amenaza para la libertad de todos», añadió. López explicó que el PSE se sumará «en lo sustancial» a la moción presentada por el PP en las instituciones vascas con el fin de condenar la totalidad de los asesinatos cometidos por ETA.
EL CORREO, 18/6/11