Sobre el actual sistema fiscal, dice que las diputaciones no pueden mantenerlo
Pensemos en qué reclaman los ciudadanos, no en cómo conservamos poder’
López, en una entrevista publicada en el último boletín del grupo parlamentario socialista en la Cámara vasca, indica que el fin del terrorismo de ETA debe abordarse «desde la memoria, sin dar un paso atrás en todo lo conseguido pero con visión de futuro». Considera que ahora el escenario es «inédito» con respecto a ETA, una organización que dice que está en el momento operativo «más débil en su historia» y que también está «en su mayor grado de debilidad en apoyo social».
López insiste en que esta situación se ha conseguido desde «la firmeza democrática», desde la actuación policial y desde el «respeto escrupuloso» a la Justicia.
«Son las reglas del juego a las que se han tenido que someter, por primera vez, los ámbitos políticos que antes respaldaban o excusaban o se amparaban en la violencia», recalca.
El lehendakari recuerda que en el pleno de política general que se celebrará el 29 de septiembre en el Parlamento Vasco presentará un plan de Paz y Convivencia, del que no adelanta detalles, con el fin de explicar a los vascos y a sus representantes lo que el Ejecutivo vasco considera «que se debe hacer y lo que no».
Al respecto, pide a los grupos parlamentarios que tengan «altura de miras suficiente» para no establecer una «contienda partidista» y que realicen aportaciones para que en Euskadi se consolide «la paz verdadera en libertad».
En la entrevista, López también opina que las diputaciones vascas «no tienen una alternativa para mantener el actual sistema público con el sistema fiscal» en vigor.
En cuanto al proyecto de Ley Municipal aprobado la pasada semana por el Gobierno vasco, el lehendakari recuerda que Euskadi es la única comunidad autónoma que no cuenta con una regulación de este tipo y destaca que en el texto se han recogido las reclamaciones de Eudel, que pedía un papel mayor de los ayuntamientos y definir la financiación suficiente para desarrollar sus competencias.
López asegura que «es una ley compleja que cierra el círculo del entramado institucional vasco«, y pide diálogo a los partidos «pese a que «algunos quieran marcar distancias».
«Pensemos en qué reclaman los ciudadanos de sus instituciones, no en cómo conservamos cuotas de poder», concluye López.
EL MUNDO, 7/9/11