DIARIO VASCO, 25/2/12
Comparecerá en el Parlamento Vasco para exponer sus iniciativas ante el final de ETA. Urkullu emplaza al lehendakari a convocar elecciones para que la izquierda abertzale participe del acuerdo
El lehendakari quiere aprovechar el acuerdo sin precedentes alcanzado el martes en el Congreso para el final de ETA para tejer en Euskadi un nuevo consenso, todavía más amplio, por la paz. Patxi López impulsará la creación de una ponencia en el Parlamento Vasco sobre la construcción de la convivencia tras el fin de la violencia de ETA, en la que tendrá cabida la cuestión de los presos. Ésta será la principal medida que adoptará el máximo responsable del Gobierno Vasco en los próximos días, una vez que comparezca en los próximos días en un pleno en la Cámara para exponer sus intenciones, según fuentes del Ejecutivo autonómico.
El pacto alcanzado esta semana en Madrid por PP, PSOE, PNV y CiU para adaptar la política del Gobierno de Rajoy al nuevo tiempo sin violencia le ha servido a López para activar la búsqueda del liderazgo en Euskadi de la gestión del cese del terrorismo. El mandatario socialista pretende trasladar a Euskadi el acuerdo del Congreso y ampliar los apoyos. De momento se ha encontrado con el escepticismo del PNV. Su presidente, Iñigo Urkullu, le instó a adelantar las elecciones autonómicas para que la izquierda abertzale ilegalizada pueda participar del consenso propuesto por el líder del Gobierno Vasco.
López aprovechó el pleno de control y una pregunta de Gorka Maneiro (UPyD) sobre unas declaraciones suyas respecto a Arnaldo Otegi para anunciar que, nada más acabar su respuesta, presentaría una solicitud de comparecencia en el Parlamento para impulsar un proceso de diálogo y negociación que concluya en acuerdos para «definir foros y fórmulas que nos permitan seguir avanzando». El objetivo es apuntalar la pacificación y normalización y cerrar «el ciclo terrorista», en línea con el importante acuerdo suscrito en Madrid.
La idea del lehendakari no es tanto competir con Mariano Rajoy por el liderazgo de la gestión del final de ETA sino crear una vía paralela en Euskadi para, de la mano del Gobierno Vasco, construir la convivencia. De hecho, el acuerdo del Congreso pedía al Gobierno central abrir conversaciones con el gabinete de López. El lehendakari quiere residenciar en el Legislativo de Vitoria, y nunca en mesas de partidos extraparlamentarias, el desarrollo y actualización de su decálogo para la paz presentado en septiembre en el pleno de política general. Diez puntos que abogaban por la memoria de las víctimas, el acercamiento parte de los presos de ETA y la legalización de Sortu.
El rol de la izquierda abertzale
El Gobierno Vasco parte de la lectura de que el acuerdo del Congreso es importante pero con un amplío margen de desarrollo por delante. Por tanto, el Ejecutivo socialista aspira a consolidarlo y a dotarlo de mayor contenido. El mínimo es alcanzar un acuerdo con los dos grandes partidos de la Cámara, PNV y PP, aunque el objetivo es sumar a formaciones como Aralar, EB o, incluso, UPyD. En el caso de la izquierda abertzale proscrita, y pese a las críticas de ayer de Urkullu, el lehendakari se limitará a intentar sumar al parlamentario de EA, formación, recuerdan desde Lakua, integrada junto a la formación independentista en las coaliciones Bildu y Amaiur, en Juntas y el Congreso, respectivamente.
A la espera de que el lehendakari dé mas detalles de sus intenciones, fuentes del Ejecutivo socialista explicaron que la ponencia que se creará buscará acuerdos para la convivencia futura en Euskadi en el nuevo tiempo sin violencia, pero no será monográfica. Así, la política penitenciaria ocupará su espacio aunque todavía no está claro como se articulará. Este tipo de grupos de trabajo en la Cámara permite invitar a grupos y personas relacionadas con los temas que se debatan, aunque es improbable que el lehendakari llame a dirigentes de la antigua Batasuna. La Mesa del Parlamento calificará el martes la solicitud de comparecencia y la Junta de Portavoces decidirá después si incluye o no la intervención de López en los plenos de la semana que viene o la pospone.
Tras el pleno, el ayer portavoz del PNV, Ricardo Gatzagaetxebarria, consideró positivo el planteamiento de López. No obstante, por la tarde, Urkullu matizó la valoración y recordó que él ya había propuesto una «habilitación parlamentaria» de la gestión del final de ETA. El presidente del PNV consideró que él «mediría los tiempos» a la hora de realizar planteamientos en la Cámara vasca. En declaraciones a Europa Press, indicó que el Gobierno Vasco «lo tiene fácil» y, si quiere pensar «desde el PSE-EE, en un pronunciamiento del Parlamento Vasco en favor de Amaiur, de la izquierda abertzale, o de los pasos que hay que dar, que disuelva el Parlamento, convoque elecciones autonómicas, y se permita que haya candidaturas de la izquierda aber-tzale y un Parlamento que represente todas las sensibilidades».
Todavía no está definida la postura que adoptará el PNV, que ya en octubre rechazó la oferta del lehendakari para sumarse a convocatorias unitarias para el cese de la violencia de ETA. Más factible parece el apoyo del PP, aunque sus socios populares querrán, probablemente, modular las posiciones del PSE-EE respecto a presos o Sortu. El anuncio del lehendakari no sorprendió a la formación de Antonio Basagoiti, ya que conocía previamente las intenciones del mandatario socialista. El PP vasco espera a las concreciones para decidir hasta dónde llega su respaldo.
Por su parte, el secretario general de EA, Pello Urizar, instó a López a no circunscribirse «exclusivamente» a la actual representación parlamentaria, puesto que falta el mundo de Batasuna. De ser así, EA pondría objeciones.
Pregunta de UPyD
El anuncio del López oscureció el motivo de la pregunta original de Gorka Maneiro, que interpeló al lehendakari acerca de la entrevista en Gara, en la que opinaba que la permanencia en la cárcel del ex portavoz de Batasuna, Arnaldo Otegi, es «contraria a la opinión y el sentimiento de la sociedad vasca».
Maneiro criticó que el mandatario socialista no respondiera que Otegi no es «un preso político», que era el sentido de la pregunta del periodista, con lo que no estaba haciendo «pedagogía democrática». López le recordó que tanto él como el PSE-EE han estado toda la vida defendiendo el sistema democrático. Acusó a UPyD de mantener una postura de «buscar protagonismo y rentabilidad electoral», mientras el resto de fuerzas trabajan para la «superación del ciclo del terrorismo».
DIARIO VASCO, 25/2/12