EL PAÍS, 21/7/2011
El lehendakari, Patxi López, colocó ayer a su Gobierno en el lugar central de la escena política vasca y dejó establecidos, con un documento de 21 páginas que entregó a cada uno de los tres diputados generales del País Vasco, los parámetros del debate político e institucional para el próximo curso y, en parte, para el resto de su mandato.
Ante una reunión inicialmente de marcado acento tributario, López planteó el restablecimiento del impuesto sobre el patrimonio con un mínimo exento de 300.000 euros, excluyendo la vivienda habitual, y la tributación de sucesiones y donaciones con idéntico mínimo exento y con un tipo del 0,8%. El lehendakari tendrá el apoyo de Bildu sobre el impuesto d epatrimonio.
El ejercicio de iniciativa política por parte de López, no obstante, fue lo más relevante de los encuentros de ayer, con el añadido de la peculiaridad de la conversación con Martin Garitano (Bildu), en cuya parte final introdujo López un emplazamiento para el fin del terrorismo. El diputado general de Gipuzkoa aseguró que este tema no había surgido.
El lehendakari calificó de «complejo» el panorama de reparto de poder entre cuatro partidos que han dejado las elecciones del 22-M, pero reiteró que lo considera «una oportunidad» para «proponer objetivos colectivos y compartidos que conciten el máximo consenso ciudadano posible». Dijo que se siente ante la responsabilidad «de dar cohesión y vertebrar el conjunto del país» y de marcar sus «prioridades políticas».