EL CONFIDENCIAL 12/10/16
· Varios secretarios de Organización de las federaciones que ayudaron a tumbar al ya exlíder el 1 de octubre se ven en el cuartel general para «analizar la situación» y compartir puntos de vista
Apenas queda semana y media y el PSOE sigue divagando, haciendo círculos sin tomar una decisión porque ninguna está cien por cien clara ni exenta de riesgos. La gestora conduce la máquina indudablemente hacia la abstención, advirtiendo de los peligros de unos terceros comicios que podrían reforzar la mayoría del PP, pero en el partido, incluso en las federaciones que contribuyeron a desalojar a Pedro Sánchez de Ferraz, hay dudas sobre cuál es la mejor estrategia, que minimice los daños para el PSOE y a la vez sea explicable ante los ciudadanos y los militantes. Javier Fernández, el presidente de la gestora, espera llegar al comité federal con la tensión rebajada, con un debate «sosegado». Y para eso sabe que le toca hablar largo y tendido con los territorios para intentar articular una posición mayoritaria, y no será sencillo. Por lo pronto, quienes están comenzando a coordinarse son las cúpulas regionales que tumbaron al ya ex secretario general el pasado día 1. Este martes, algunos de sus secretarios de Organización se vieron en Ferraz para ir preparando el próximo comité federal, que en principio se celebrará el 23 de octubre, la víspera de la última ronda de contactos del Rey con los líderes políticos.
El andaluz Mario Jiménez, portavoz de la dirección provisional del PSOE y nuevo responsable del aparato, y la extremeña Ascen Godoy, su adjunta en Organización, ejercieron de anfitriones de los contactos en la sede federal. Según relataron a El Confidencial varios de los asistentes a la cita, no hubo decisiones. Ni se diseñó la estrategia. Se trató más de una primera ronda para «analizar la situación» y compartir puntos de vista. «La gestora tendrá que tomar nota, escuchar a todos y exponer una opinión. Y evidentemente entre nosotros —aseguraba uno de los secretarios de Organización presentes ayer en Ferraz— no se ven igual las cosas desde el sur, desde Valencia o desde otros puntos de España. Hay que hacer el esfuerzo de ponerlo en común«.
Varios de los asistentes quitan trascendencia a la cita y subrayan que era necesario recuperar la «normalidad» del diálogo de Ferraz y los territorios
Las fuentes consultadas restaban trascendencia a la reunión en Madrid, con el argumento de que era urgente «retomar la normalidad del partido«. O sea, las conversaciones frecuentes entre Ferraz y los territorios, una práctica, arguyen, que se perdió en la última etapa de Sánchez, al que veían encastillado en sus posiciones y aislado. De ahí que lo importante, como siempre recuerdan en la gestora, sea reconstruir los puentes rotos, recomponer la unidad perdida y el hilo de diálogo con las terminales autonómicas. Pero lo cierto es que en Ferraz estaban convocados los secretarios de Organización de las federaciones que lideraron la ‘rebelión’ contra el ya depuesto líder socialista. Los que caen del lado sanchista no habían recibido ninguna citación, según confirmaron varios de ellos a este periódico. Entre los que sí asistieron, figuraban los jefes de Organización de territorios de peso, como Juan Cornejo (Andalucía), Alfred Boix (Valencia) o Pilar Alegría (Aragón), a los que hay que sumar la número dos del extremeño Guillermo Fernández Vara, Ascen Godoy, ahora en el puente de mando de la dirección interina del PSOE. El asturiano Jesús Gutiérrez no pudo acercarse, pero en la sede sí se encontraba su jefe, Javier Fernández, porque allí se acercó tras su entrevista en Telecinco a primera hora de la mañana.
De cualquier modo, se trataba de un contacto informal, no de una ‘cumbre’ de responsables de Organización de toda España. Y sí es cierto que el jefe del Ejecutivo asturiano y sus compañeros de la cúpula interina van hablando con dirigentes sanchistas. Fernández ya ha charlado con Francina Armengol, la única presidenta autonómica socialista leal con el exlíder hasta el final, que le repitió su rechazo a Rajoy y quiere nuevos comicios porque es «la única solución» que los contrarios a Sánchez «dejaron», ya que ella era de las que apoyaba buscar un Gobierno alternativo. «Se está trabajando con todos«, recuerda una responsable ubicada en el núcleo de confianza del presidente del Principado.
· Susana Díaz afila su perfil anti Rajoy y llega a Madrid para hablar de la abstención
El barco socialista se encamina hacia la abstención como único remedio para evitar terceras elecciones. Pero hacer la maniobra no es sencillo cuando se procede de un férreo «no es no» que caló entre la militancia. Además, la posición no es homogénea entre los anteriormente críticos. Asturias, Extremadura y (de forma soterrada) Andalucía apuestan por la abstención, pero Castilla-La Mancha, por ejemplo, cree (al menos hoy por hoy) que dado que el PSOE no puede garantizar la estabilidad al PP y este se la va a exigir continuamente, quizá sea mejor acudir a las urnas.
El jefe de la gestora ya ha iniciado los contactos con los barones: ya ha conversado con la balear Francina Armengol, que prefiere terceras a la abstención
El valenciano Ximo Puig, mientras, no tiene nada claro —»Todos en estos momentos tenemos muchas dudas, porque la gente que razona tiene dudas», y porque «la vida no es 50-50, ni es blanco ni negro, ni es un debate maniqueo«, afirmó el lunes en Valencia—, porque se da cuenta de que «hay que recorrer un campo minado en apenas 15 días», aseguran desde su entorno más directo. «Él sabe cómo está la militancia, enardecida con el no a Rajoy, y es consciente de que no hay tiempo para que el antídoto surta efecto. Es que Pedro suministró el veneno y se quedó con el antídoto, y ahora no tenemos margen para fabricarlo. Por eso, a Ximo le preocupa el estado anímico de las bases», agregan. El presidente aragonés, Javier Lambán, ha venido apostando por el no al presidente en funciones, pero también es cierto que es uno de los barones más próximos a Susana Díaz. No obstante, todos los que no comulgan al cien por cien con la abstención precisan que si esa es la postura del comité, la acatarán y defenderán, y sus diputados la respetarán.
La «pluralidad» entre los detractores de Sánchez evidencia, argumentan, que el ex secretario general construyó una «falacia», que aquellos que estaban contra él se situaban del lado de Rajoy. Los números para defenestrar a Sánchez, de hecho, no tienen por qué ser idénticos a los que faciliten un Gobierno al PP, una decisión también muy dolorosa, por mucho que Fernández venga insistiendo, desde su aterrizaje como presidente de la gestora, que no es una cuestión ideológica, sino «táctica», que «abstenerse no es apoyar», y que es preferible un Gobierno en minoría del PP que uno que se acerque a la mayoría absoluta. Y más ahora, con los juicios de la primera época de la Gürtel y de las tarjetas ‘black’ en marcha.
· La gestora debate cómo dar paso a Rajoy: abstención de 11 diputados o todo el grupo
Prefieren por “coherencia” que todos los socialistas den paso a Rajoy, pero temen que se exhiba una fractura más allá del PSC y con Pedro Sánchez al frente de los rebeldes
El PSC, Sumelzo, Robles…
Además, ¿cómo se materializaría esa abstención? El PSOE andaluz, por ejemplo, prefiere que todo el grupo —sus 84 diputados, porque el número 85 es en realidad el portavoz de Nueva Canarias, Pedro Quevedo, que se presentó el 20-D y el 26-J en coalición con los socialistas— vote lo mismo, pero ello visibilizaría la fractura interna. Facilitar al PP las 11 abstenciones que le hacen falta sería una postura más cómoda, pero presentaría al PSOE como un partido que se avergüenza de su decisión y no lo haría escaparse de la tormenta de críticas que caería de Podemos.
Los socialistas catalanes insisten en que no aceptarán el paso a la abstención. Margarita Robles no descarta dejar su escaño si el PSOE cambia su posición
El PSC ya ha advertido de que si se impone la abstención en el comité federal, sus siete diputados romperían la disciplina de voto y se quedarían en el no. Una promesa formulada tanto por el actual primer secretario y candidato a la reelección, Miquel Iceta —anoche mismo dijo en ‘El hormiguero’ que de tragar con la abstención, su partido se quedaría «fuera de juego» de la política catalana—, como de su oponente en las primarias, Núria Parlón, alcaldesa de Santa Coloma de Gramenet (Barcelona). Ambos se batirán en las urnas entre los militantes este sábado, para luego celebrar su congreso a principios de noviembre. También la aragonesa Susana Sumelzo, fiel sanchista, adelantó la semana pasada que votaría en contra de Rajoy, aunque el comité federal decidiera lo contrario. Este mismo martes, la jueza Margarita Robles, número dos del PSOE por Madrid en las generales de junio, no descartó dejar su escaño si el máximo órgano de poder de la formación opta por facilitar el Ejecutivo a los conservadores, alternativa que cree «muy difícil» de justificar.
Y aún está por ver qué harían otros diputados muy próximos al ex secretario general, y qué haría él mismo para conservar su perfil intacto y poder regresar a su cargo en el siguiente congreso aupado por las bases. Los críticos son conscientes de que cualquier paso en falso podría reforzarle a la larga, igual que los sanchistas aseguran que recuperarán el timón del partido, porque los barones «ni conectan con las bases ni conectan con la ciudadanía«.
No a las «barricadas» contra el PP
Aún queda algo más de una semana para que el comité federal adopte la decisión definitiva, si como todo indica se reúne el 23 de octubre. Y entretanto, la dirección provisional busca hacer pedagogía a su manera de la abstención, porque ningún presidente autonómico ha querido tomar esa bandera. «Hay que ir paso a paso, porque nadie quiere enarbolar esa lucha. De momento, se está en advertir del peligro de terceras elecciones, y luego se dará el siguiente salto», vaticina un parlamentario con muchos trienios y que conoce bien la fontanería del PSOE. «Las cosas van bastante mejor de lo esperado. Javier está funcionando muy bien y la mayoría de la gente no quiere más batalla» después del sangriento comité federal del 1 de octubre, subraya otra dirigente muy reputada en la formación y con contacto directo con la gestora.
Fernández admite que «en política hay que estar en condiciones de convivir con la decepción» e insiste en que «abstenerse no es apoyar» al PP
Fernández, en una entrevista en ‘El programa de Ana Rosa’, en Telecinco, insistió en que «abstenerse no es apoyar» y admitió que «en política hay que estar en condiciones de convivir con la decepción», expresando así que facilitar el Ejecutivo a Rajoy es la salida menos mala para un PSOE devastado. Si no hay abstención, avisó, el PP «pasaría de 123 diputados a la mayoría absoluta«. También abogó por no construir «una barricada ética, moral o de los buenos» que le «impida hablar con los malos» populares, porque recibieron casi ocho millones de votos que hay que «respetar«. El jefe de la gestora reconoció que la cúpula tiene un problema con las bases, porque entre los militantes «hay una parte mayor» que «no desea» que el PSOE facilite la reelección a Rajoy, aunque «hay otra muy sustancial» que rechaza ir a nuevas elecciones, a las que el PSOE no puede ir «cuando un 30% de sus votantes no están de acuerdo» con ellas y creen que es su formación la responsable de ellas.
«En principio, si hay abstención, hay abstención«, respondió Fernández cuando se le preguntó si ve factible que los socialistas concedan los apoyos necesarios al líder del PP y punto. «Pero no sé en qué terminos podríamos llevarla a cabo en el Congreso», reconoció a continuación.
El presidente de la gestora es este miércoles, 12 de octubre, día de la Fiesta Nacional, uno de los centros informativos. Y con él los barones del PSOE que acudan al desfile en la capital y a la posterior recepción en el Palacio Real. La presión es máxima y el plazo se extingue.
Valenciano explicita su apuesta por la abstención
Tras dos años prácticamente desaparecida, desde que Pedro Sánchez la descabalgó como jefa de la delegación socialista española en Bruselas, Elena Valenciano vuelve. La gestora la eligió el lunes como su propuesta para la vicepresidencia del grupo de los socialistas europeos, cargo que hasta ahora ejercía el madrileño Enrique Guerrero.
Valenciano, número dos del PSOE con Alfredo Pérez Rubalcaba y amiga de Javier Fernández, explicitó este martes su apuesta por la abstención. «Prefiero un Gobierno en minoría de Rajoy a unas terceras elecciones«, arguyó, en línea con los argumentos del presidente de la gestora. La eurodiputada, en una entrevista en Onda Cero, recalcó que, si hay terceros comicios, el PP podría ganar con mayoría absoluta, por lo que otras elecciones serían un «desastre para el sistema democrático en su conjunto, no sólo para el PSOE», informa Efe.
La ex vicesecretaria alabó el nombramiento de Ramón Jáuregui como nuevo jefe de la delegación en la Eurocámara -«No puede haber mejor portavoz. Me gusta su estilo, lo que dice lo piensa. Nos da prestigio a todos»-, criticó que la dirección de Pedro Sánchez hubiera «desviado su estrategia» en varias ocasiones en los dos últimos años, elogió a Fernández como el «referente vivo en ejercicio más importante del PSOE» y añadió que él «da el perfil de secretario general» del partido.