La abstención para hacer posible la investidura de Mariano Rajoy avanza en el PSOE a pasos agigantados. Después de que el poderoso PSOE andaluz abogara el lunes claramente por la abstención del Grupo Socialista para investir a Rajoy, esta postura gana adeptos de cara al Comité Federal que se celebrará el domingo.
La mayoría de los críticos admiten ya, algunos en público, que acatarán lo que decida el máximo órgano del partido.
Susana Díaz está convencida de que el domingo ganará la votación en el Comité Federal y de que el PSOE aprobará que lo mejor para España y para el partido es la abstención de todos sus diputados para hacer presidente a Mariano Rajoy y evitar las terceras elecciones. Así lo consideran ya también prácticamente todos los barones, tanto los afines a Díaz que derribaron a Pedro Sánchez como los partidarios del no a Rajoy hasta el final.
Varios barones críticos admitieron anoche en conversación con EL MUNDO que creen que el Comité Federal aprobará la abstención. «No han llegado tan lejos para quedarse a mitad de camino; tras derrumbar a Pedro Sánchez, ahora tenían que terminar el trabajo y hacer presidente a Rajoy», lamentó uno de los muchos secretarios generales partidarios del no en conversación con este diario.
Este convencimiento lo tienen también los miembros de la anterior dirección. Los críticos asumen ya su derrota. Eso sí, advierten de que el Comité Federal aprobará la abstención sin tener en cuenta el clamor de la militancia, que en asambleas celebradas en toda España –también en Andalucía– están aprobando mantener el no a Rajoy, consultar a la militancia para tomar esta decisión y la convocatoria inmediata de un congreso federal.
El que ha sido número dos del PSOE con Pedro Sánchez, César Luena, aseguró ayer, tras la reunión de los diputados y senadores socialistas con el presidente de la Gestora, Javier Fernández, que si el Comité Federal decide abstenerse, aun siendo «legítimo orgánicamente», la decisión «estará deslegitimada en el fondo político, por no escuchar a los militantes, que son los que tienen que tener la voz».
Aun así, Luena y otros diputados próximos a Sánchez, como Adriana Lastra o Pilar Lucio, admitieron que acatarán lo que decida el Comité Federal aunque sea la abstención.
En contra de la abstención que promueven el PSOE andaluz y Javier Fernández se mantienen, al menos, 10 federaciones de 17. La más firme es el PSC. El primer secretario de los socialistas catalanes, reforzado el sábado al ganar sus primarias, visitó ayer a Javier Fernández en Ferraz y le trasladó que el no del PSC es definitivo. Ayer no quiso hacer declaraciones.
Su entorno insiste en que Iceta no ha cambiado de posición sobre lo que aseguró el lunes, cuando dijo que los diputados catalanes votarán no decida lo que decida el Comité Federal del domingo.
Además del PSC, se mantienen en el no a Rajoy las direcciones del PSOE en Baleares, País Vasco, Castilla y León, Madrid, Galicia, Cantabria, Murcia, Navarra y La Rioja. Eso sí, casi todas menos el PSC aceptarán lo que decida el partido.
El PSOE de Castilla-La Mancha aboga por una posición intermedia: no a Rajoy y no a terceras elecciones. Eso supondría, según fuentes de la dirección del PSOE regional, la abstención técnica de 11 diputados, una postura minoritaria que defienden pocos dirigentes socialistas.
Más fracturado está el PSOE de la Comunidad Valenciana. Su líder, Ximo Puig, no tiene una posición definitiva. Su portavoz en las Cortes regionales, Manuel Mata, se situó ayer sin matices en el no a Rajoy. Y así está todo el PSPV-PSOE, partido entre el no y la abstención.
La Comisión Gestora convocó ayer el Comité Federal para el domingo con un orden del día neutro que reza: «Debate y votación de la posición política del Grupo Parlamentario Socialista en el Congreso ante el proceso de investidura».
Si el PSOE decide la abstención general, fuentes socialistas calculan que no romperán la disciplina de voto más de 13 ó 14 diputados. Tanto desde la nueva dirección como fuentes de los críticos coinciden en que rechazarán votar la abstención los siete diputados del PSC (incluida Meritxell Batet), la independiente Margarita Robles y parlamentarios aislados como Odón Elorza (Izquierda Socialista), los dos de Baleares –Sofía Hernánz y Pere Joan Pons– y la aragonesa Susana Sumelzo, que se mantiene firme en el no a Rajoy. Varias fuentes apuntan a que Pedro Sánchez tampoco podrá abstenerse tras resistir hasta el final como secretario general en defensa del «no es no».
Sánchez podría no acudir a la votación o incluso dejar antes su acta de diputado. Su entorno asegura que el ex secretario general está pensando mucho qué hacer en el caso de que el Comité Federal apruebe la abstención.
Los diputados y senadores del PSOE se reunieron ayer en el Senado con Javier Fernández y manifestaron una opinión ya claramente inclinada hacia la abstención. De 17 parlamentarios que tomaron la palabra –19 no pudieron hacerlo por falta de tiempo–, 14 se manifestaron contra las terceras elecciones y en general a favor de la abstención frente a tres que defendieron el no a Rajoy hasta el final.
Los díscolos fueron Margarita Robles (diputada independiente), Odón Elorza (Izquierda Socialista) y Marc Lamuà (PSC). Otros partidarios del no, como el senador Ander Gil, no pudieron intervenir ni defender su posición porque no les dieron la palabra.
La mayoría de los que hablaron a favor de la abstención, entre ellos muchos andaluces, apostaron además por que el Comité Federal apruebe una posición política que tenga después que ser defendida por los 84 diputados socialistas. Nada de una abstención técnica que obligue sólo a abstenerse a 11 diputados, como defiende el secretario general del PSOE de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page.