EL MUNDO 13/05/13
Advierten por carta de que no usarán libros de texto con modalidades insulares
Profesores catalanistas de Baleares envían cartas a las editoriales con amenazas veladas advirtiéndoles de que las boicotearán si elaboran material educativo que recoja las variedades dialectales insulares. «En caso de que su editorial decida acogerse a la subvención del Govern y lo adapte a la inexistente modalidad balear, no serán tenidos en cuenta [los libros] ni serán usados de ahora en adelante», indican, adjuntando un listado de firmas de docentes que se adhieren a la carta.
El colectivo de profesores catalanistas ha iniciado un chantaje orquestado con la ayuda de los sindicatos STEI y CCOO animando a cada centro educativo o departamento a coaccionar a las empresas a través de misivas para dejar claro que no aceptarán «ningún libro» de texto en la «inexistente» modalidad balear. «Los motivos son tan obvios que no los detallaremos», dicen en la nota.
La polémica balearización del material didáctico en las Islas ha traspasado los límites. El conflicto surgió hace un mes cuando el presidente balear, José Ramón Bauzá, anunció que destinaría 70.000 euros para subvencionar libros de texto editados en las modalidades lingüísticas baleares.
El objetivo de la Consejería de Educación es que el material didáctico incluya léxico específico de Mallorca, Menorca, Ibiza y Formentera para que los alumnos aprendan en un marco «adaptado a su realidad social». De este modo, responde a la petición de varios sectores de la sociedad, como la Fundación Círculo Balear, que critican que algunos centros educativos imparten la enseñanza de lengua y literatura catalana con libros de edición de Cataluña, con palabras propias de Barcelona en lugar de expresiones y peculiaridades de las Islas (por ejemplo, noi en vez de al·lot para referirse a un chico).
En cualquier caso, la elección de los libros está en manos del profesorado. Los equipos de coordinación de Infantil y Primaria eligen los de ambas etapas, mientras que los departamentos didácticos escogen los de Secundaria. Las editoriales son conocedoras de que su trabajo será en balde y se debaten entre ceder a las presiones o seguir adelante. Un total de siete empresas se han presentado al concurso, pero el Govern no ha desvelado sus nombres para protegerlas. De nada ha servido. Los docentes han optado por generalizar su boicot: «En marxa, pues. ¡Estamos! Cada centro, ciclo, departamento la puede enviar a sus editoriales [la carta]. Las direcciones están en los libros», ordena la Asamblea de Docentes en un comunicado interno.