EL MUNDO 17/05/13
El Consejo Asesor de la Generalitat prepara la independencia con 19 informes
La Generalitat está intentando que el Estado catalán tome cuerpo por la vía de los hechos consumados. El Govern dio ayer un paso más en la construcción de estructuras útiles después de una hipotética independencia cuando el Consejo Asesor para la Transición Nacional (CATN) anunció que uno de los informes que elaborará versará sobre «la nueva Constitución» del futuro Estado.
El presidente catalán, Artur Mas, sigue con su plan para convocar un referéndum pese al descalabro que sufrió en las últimas elecciones –CiU perdió 12 diputados– y pese a que el Tribunal Constitucional (TC) ya le ha dado el primer aviso dejando en suspenso la declaración de soberanía que aprobó en enero el Parlament. Ayer, durante la presentación del plan de trabajo de los expertos que ha elegido para que le asesoren en el camino, quedó claro que no tiene intención de variar el rumbo.
El presidente del CATN, el constitucionalista Carles Viver Pi-Sunyer, explicó que el grupo ya trabaja en 19 informes, que irá presentando hasta marzo de 2014, año en el que CiU y ERC han pactado que se celebre el referéndum. Precisamente la consulta será el objeto del primero de ellos, que estará listo antes del verano.
Pero más sorprendente fue cuando Viver Pi-Sunyer desveló que otro de esos trabajos, concretamente el sexto, tratará sobre las características que debería tener la Carta Magna del Estado catalán. En su opinión, esa «nueva norma constituyente» debería tener «carácter provisional». «Sería mejor no intentar hacer directamente la Constitución catalana», afirmó.
El presidente del Consejo Asesor de Mas dijo que esa Carta Magna catalana debería incluir «los derechos fundamentales, el análisis de las instituciones, y decisiones como qué hacer con la doble nacionalidad o el reconocimiento de las lenguas».
La permanencia en la UE o la creación de un ejército, también en estudio
Otros trabajos del organismo, que Viver Pi-Sunyer cree que no peligra tras la resolución del TC sobre la declaración del Parlament –pese a que podría entenderse que el CATN se deriva de ella–, se dedicarán a analizar entre otros aspectos las relaciones de una Cataluña independiente con la comunidad internacional, su permanencia o no en la Unión Europea, el poder judicial del nuevo Estado, la agencia tributaria o incluso «el reparto de los activos y pasivos» entre España y Cataluña.
Incluso, según informó ayer el organismo, se ponderará la necesidad de que ese hipotético Estado catalán cuente o no con un ejército.
Viver Pi-Sunyer justificó el hecho de que la práctica totalidad de los informes parta de la hipótesis de una Cataluña independiente, y no de otras opciones –como pide por ejemplo el PSC– en el hecho de que «el escenario del Estado propio es el que menos se ha explorado».
El consejero de Presidencia y portavoz del Govern, Francesc Homs, dijo que el Ejecutivo catalán «no hace nada que no esté haciendo también el español». «El Gobierno español nos explica qué consecuencias tendría que obtuviéramos un Estado propio», añadió, en referencia a los mensajes en ese sentido que llegan desde Madrid.