Pie de foto: ¿Le gusta esto a Pablo? No, no le gusta, pero eso no es motivo para que deje de trabajar con ellos. Es más efectivo lo que está haciendo
Preguntado Pablo Iglesias por cómo, siendo un partido de izquierdas, aceptaba hacer un programa «Fort Apache» para un gobierno como el de Irán, «que es una teocracia»o ¿aceptaríais hacer algo para una televisión financiada por el gobierno de Putin?». Y el gran botarate respondió:
«Pues, mira, la geopolítica es así y no vamos a ser los únicos imbéciles que no hagamos política mientras todo el mundo hace política (…) imaginaos lo que podrían decir muchos: “Ah, tú eres un traidor, eres un espía, eres un antipatriota, estás permitiendo que los alemanes –que estamos en contra de ellos los bolchevique–, también que te pongan un tren para llegar a desestabilizar tu país…”. Así es la política, así es la política… A los alemanes les interesaba poner un tren a Lenin para que desestabilizara Rusia; a los iraníes les interesa que se difunda en América Latina y en España un discurso de izquierdas porque afecta a sus adversarios. ¿Lo aprovechamos o no lo aprovechamos? Para mí, quien haga política tiene que asumir cabalgar contradicciones y nosotros estamos dispuestos a cabalgarlas».Y agregaba: «¿Son contradicciones? Por supuesto que sí. Las mujeres que trabajan en Hispan, que presentan programas, tienen que aparecer con un pañuelo que les rodea la cabeza. ¿A mí me gusta eso? No, no me gusta, no me gusta. ¿Eso es un motivo por el cual yo podría permitirme decir: “Ah, ¿pues entonces no trabajamos en esta cadena”. No, creo que es más efectivo lo que estamos haciendo».