EL MUNDO, 31/3/12
Los firmantes del Acuerdo de Gernika convocan una manifestación el 14 de abril
Defienden que supone, ‘de facto, la legalización de la cadena perpetua’
Los partidos firmantes del acuerdo de Gernika (Bildu y Aralar) han denunciado hoy que la decisión del Tribunal Constitucional de avalar la denominada Doctrina Parot evidencia que la actitud del Gobierno español es la de «abortar esta oportunidad histórica para alcanzar la paz».
Según han censurado, esta medida «extremadamente grave» constituye un «ataque frontal» y «una decisión decisión» a la resolución del «conflicto político vasco».
Para responder a la decisión de «extrema gravedad» que supone avalar la medida de «excepción y venganza» que supone con los presos de ETA la Doctrina Parot, la izquierda abertzale, Aralar, Alternatiba y EA han convocado una «manifestación nacional» para el 14 de abril en Bilbao.
Con el fin de obtener la mayor respuesta posible, los agentes políticos, sociales y sindicales que suscriben el Acuerdo de Gernika iniciarán de ronda de contactos con «el resto de agentes del país», aún por definir, para que participen en la marcha.
Por ello, el lema y «caracterización» de la movilización está abierto a al espera del resultado de los contactos que van a mantener en las próximas fechas.
Los portavoces Jabi Garnika y Lorea Bilbao han leído esta tarde un manifiesto en San Sebastián en el que han criticado que con la decisión del Constitucional el Estado «pretende que las aguas de la resolución del conflicto se estanquen con la esperanza de que se pudran».
Con esta medida, que supone de «facto la legalización de la cadena perpetua», los «poderes y aparatos del Estado muestran una vez más cuál es su voluntad ante el nuevo escenario abierto en Euskal Herria», tras el cese de la actividad armada de ETA.
Según han reprochado, se trata de una «decisión política» del tribunal que la sociedad vasca interpreta como «un ataque frontal al anhelo y deseo de soluciones y de paz mayoritarios en nuestro pueblo».
A su juicio, la ciudadanía «tiene que ser parte activa del proceso de soluciones, y a su vez, su movilización tiene que ser el motor del avance del proceso, por encima de los grandes que sean los obstáculos que el Gobierno del PP pongan en nuestro camino».
EL MUNDO, 31/3/12