SANTIAGO GONZÁLEZ, EL MUNDO – 14/06/15
· Explicábamos que los socialistas vascos habían contribuido a desalojar al alcalde popular (30% de los votos) para sustituirlo por el del PNV (12%), con la ayuda de EH Bildu. Recordarán que en Andoain fueron asesinados en 21 meses López de la Calle y Joseba Pagaza, sin que el nacionalismo gobernante ni el socialismo opositor se dieran por aludidos. Como decía Pilar Ruiz a los compañeros de su hijo asesinado: «Haréis y diréis más cosas que me helarán la sangre». Joseba Arregi, un local eximio, explicaba cómo pretendía gobernar su partido: no sólo como si ETA no existiera. Como si nunca hubiera existido.
En Vitoria, mientras, los socialistas demostraban su irrelevancia. Explicaban gentes muy cualificadas del PSE que la posibilidad de apoyar a Urtaran, junto a EH Bildu, les producía la incomodidad de las famosas líneas rojas del pobre Sánchez: no pactaremos ni con el PP ni con Bildu, una de las equiparaciones más infames que se recuerdan; nosotros somos ecuánimes, no estamos con las víctimas ni con los verdugos. Pero además, era mentira. Estaban dispuestos a votar con Bildu para despojar al PP del primer puesto que le habían asignado los votantes.
Tuvo que manifestarse el desdén nacionalista en todo su esplendor y uno de sus concejales en Andoain se abstuvo para que la batasuna Ane Karrere siga ejerciendo cuatro años más la alcaldía del pueblo en el que sus conmilitones asesinaron a Joseba Pagaza. Esto, a pesar de las admoniciones de la madre de la víctima, era demasiado incluso para los socialistas vascos, razón por la cual hicieron saber a los peneuvistas que su acuerdo para Vitoria quedaba roto y que sus concejales vitorianos votarían en blanco, rompiendo la mayoría absoluta que configuraban EH Bildu, PNV y PSE, y permitiendo la elección del cabeza de la lista más votada, el popularMaroto.
Hace unos años, al ser destituido del Gobierno vasco Javi Madrazo, el tenaz soporte de izquierdas de Ibarretxe, o como él gustaba de titularse «el rojo brazo del Gobierno vasco», un habitual de mi blog que firmaba como Belisario, escribió un epitafio ejemplar: «Sic transit gloria mindundi». Nadie sospechó la posibilidad de que andando el tiempo, IU se quedara un par de escalones por debajo del nivel en que la había dejado Javi Madrazo en valores morales.
Pero así ocurrió. Irabazi, coalición que reúne a Izquierda Unida y Equo, que iba a votar a su propio candidato, cambió de posición, y apoyó con el voto de su único concejal la candidatura del peneuvista Urtaran. Los votos de Bildu, junto a los de Podemos, el PNV e Irabazi, suman la mayoría absoluta. El PSE es más irrelevante que IU pese a cuadruplicarles en concejales en Vitoria, donde ETA asesinó a Buesa y se ha dejado arrebatar por Bildu y el PNV la alcaldía en Andoain, donde ETA asesinó a Pagaza. Cuando sepa esto Ángeles Pedraza, no sé yo si va a seguir considerando que el discurso de Urkullu «supone un antes y un después» o es que el después se parece mucho al antes. Y no digo nada cuando se entere Sánchez.
SANTIAGO GONZÁLEZ, EL MUNDO – 14/06/15