Los policías exigen a los jueces más contundencia contra los violentos

La Unidad de Intervención Policial (UIP), muy especialmente quienes fueron brutalmente agredidos el sábado por agitadores del 22-M, recibieron ayer el homenaje de sus compañeros del Cuerpo. Fue un acto de «dignidad» en defensa de quienes llevan «dos años echándose sobre sus espaldas la defensa de la seguridad de la sociedad española frente a quienes solo buscan extender la violencia y el caos».

Las concentraciones, respaldadas por SUP, CEP UFP y SPP, se celebraron en varias ciudades de España, pero la más numerosa estuvo ante la sede central que la UIP tiene en Madrid, donde se concentraron alrededor de 800 personas. Fue un homenaje a quienes «dan lo mejor de sí mismos para convertir la UIP en la mejor unidad de orden público de toda Europa», según el manifiesto leído.

Entre los asistentes se encontraban los integrantes del grupo «Puma 70», que quedaron aislados cuando socorrían a dos agentes municipales, y fueron entonces brutalmente agredidos. Uno llevaba muletas, otro bastón y había quienes aún tenían el brazo en cabestrillo. Allí estaba, también, el agente a quien un terrorista callejero le asestó por detrás varios golpes con un objeto punzante. El chaleco antitrauma le salvó la vida. «Seguiremos cumpliendo con nuestro deber, somos profesionales».

Pero en el manifiesto, sus compañeros pidieron a la Fiscalía y a los órganos judiciales que «su actuación sea todo lo contundente que debe ser ante agresiones tan graves». Entre gritos en contra de los violentos y petición de responsabilidades, el lema más repetido ayer fue «hoy todos somos UIP».

Por la tarde, los representantes sindicales mantuvieron una reunión con el director adjunto operativo, Eugenio Pino. Se aclaró que no hay abiertos expedientes sancionadores contra agentes, sino una «información reservada», para la que han nombrado a varios secretarios y dos instrucciones. Tomarán entre 50 y 60 declaraciones. Además, la Abogacía del Estado se personará contra los detenidos.