EL CORREO, 5/10/11
Los populares tendrían la victoria en 14 de las 17 autonomías, así como en Ceuta y Melilla, y conseguirían un vuelco histórico en Andalucía
Los socialistas vascos pueden ser la primera fuerza en Euskadi en las elecciones del 20-N al obtener siete escaños, según la encuesta del CIS. De confirmarse este resultado, y aunque serían dos menos que los conseguidos en 2008, constituiría un notable éxito para el PSE. El sondeo señala que el PP se quedaría con cinco, el PNV con tres y Amaiur con otros tres.
Los resultados del CIS provocaron bastantes dosis de sorpresa en la mayoría de los partidos. En comicios anteriores, cuando el PP ha ganado en el conjunto de España, también lo ha hecho en el País Vasco. En 2000, por ejemplo, cuando José María Aznar logró mayoría absoluta, los populares sacaron siete diputados y los socialistas cuatro. En las victorias de Zapatero ha sido el PSE el que ha estado por delante. En esta ocasión sucedería todo lo contrario. Frente a la debacle del conjunto del PSOE, los socialistas vascos mantendrían el tipo de forma más que digna.
Hace cuatro años el PSE obtuvo nueve escaños, una cifra histórica en la que influyó un importante voto ‘antiPP’ y la ausencia de la izquierda abertzale. La formación de Patxi López admite que es un resultado imposible de igualar. Ayer también reconocía que las cifras del CIS podrían ser «demasiado optimistas». Según el instituto demoscópico, tres escaños serían por Bizkaia, dos por Álava y dos por Gipuzkoa.
En segunda posición quedarían los populares, obteniendo cinco actas -dos por Bizkaia, otras tantas por Álava y una quinta por Gipuzkoa-. PNV y Amaiur empatarían a tres escaños. El resultado sería dramático para la formación de Iñigo Urkullu, que se quedaría sin grupo propio. Los jeltzales sumarían dos en Bizkaia y se quedarían sin representación en Álava, un territorio que tampoco tendría diputado de la izquierda abertzale. Por contra, Amaiur obtendría dos escaños en Gipuzkoa.
A la contra
Los resultados irían a la contra de lo que puede suceder en el resto de España. El estudio indica que las listas populares lograrían la victoria en 14 de las 17 comunidades y en Ceuta y Melilla. Los candidatos del PP al Congreso ganarían donde ya salieron victoriosos en los últimos comicios. Además de en Euskadi, el PSOE solo vencería en Cataluña, donde también sufrirían un notable castigo. La única autonomía que el CIS deja en el aire es Asturias. PSOE y PP empatarían a dos escaños.
Pese a la crisis y los recortes que ha acometido en las comunidades en las que gobierna, el Partido Popular mejorará el número de diputados en todas las regiones en las que ganó en 2008 y al menos en cuatro de ellas lo hará de manera sorprendente. En Galicia, por ejemplo, pasaría a disponer de 15 de los 23 diputados en liza, con un aumento de cuatro, frente a los seis que el CIS adjudica al PSOE. Y en Valencia, el ‘caso Camps’ no pasará factura alguna. Los conservadores mejorarían la victoria de 2008 y de los 19 diputados de entonces subirían hasta 20.
Uno de los datos más relevantes es que el PP está en condiciones de lograr el vuelco electoral y una victoria en Andalucía: su primer triunfo en este territorio desde la restauración de la democracia.
La prospección del CIS indica que los populares acabarían en las elecciones generales con el último gran bastión socialista al hacerse con entre 34 y 35 de los 60 escaños que se ponen en juego en esa comunidad autónoma. Los socialistas, según el sondeo, obtendrían entre 24 y 25, con un descenso de una decena de asientos sobre los resultados electorales de 2008.
EL CORREO, 5/10/11