EL CORREO, 5/5/12
Dicen que el robo de coches en Francia o la falsificación de carnés sirven para «mantener» sus estructuras
Los etarras «seguirán» portando armas, pero «no las van a utilizar ni para evitar detenciones». Es la promesa que la Comisión Internacional de Verificación ha obtenido por parte de la cúpula de la banda, después de que la propia CIV alertara el pasado enero sobre los riesgos de portar pistolas. Un tiroteo registrado en Francia entre varios miembros de un comando y las fuerzas de seguridad galas llevó al grupo de expertos encabezado por Ram Manikkalingam a pedir a la organización terrorista que sus miembros dejaran de llevar armamento, como gesto de buena voluntad y para evitar que un hipotético altercado con la Policía pudiera provocar heridos o, incluso, muertos.
En el recuerdo de los franceses está muy presente el caso del agente Jean-Serge Nèrin, última víctima de la banda. ETA ha contestado a los verificadores que «sólo» emplearan sus pistolas «si su integridad física está amenazada», pero en ningún caso servirán para repeler a las fuerzas de seguridad.
La promesa es una de las cuestiones que la CIV ha detallado a los diferentes partidos políticos, sindicatos, colectivos de empresarios y representantes de la Iglesia con los que se ha reunido en los dos últimos días. El jueves mantuvieron encuentros por separado con Iñigo Urkullu (PNV), José Antonio Pastor (PSE), Rufi Etxeberria (izquierda abertzale) y Urko Aiartza (Amaiur), además de con responsables de los sindicatos UGT, CC OO, ELA y LAB, la patronal Confebask -acudió su líder, Nuria López de Gereñu- y la Iglesia, encabezada por el obispo emérito Juan María Uriarte. También se entrevistaron por segunda vez con el Gobierno vasco, en una cita a la que acudieron el consejero de Interior, Rodolfo Ares, y el comisionado del lehendakari, Jesús Loza.
Ayer cerraron el ciclo de contactos con un encuentro donde todos ellos -excepto el Ejecutivo de López- departieron juntos en un hotel bilbaíno por espacio de hora y media. El grupo de expertos no ha conseguido abrir ningún canal con el PP vasco.
El mensaje que los verificadores les transmitieron es que ETA está cumpliendo con sus compromisos adquiridos, no sólo desde octubre pasado, sino desde el alto el fuego declarado hace «18 meses». La organización armada, a través de la comisión, ha querido restar importancia a los robos de vehículos detectados en Francia -en apenas veinte días de marzo se contabilizaron cinco coches robados, en el que ha sido el primer rebrote de esta actividad-, a la incautación de carnés falsos en suelo galo y a los episodios de kale borroka en Euskadi. Unas cuestiones que obedecen, subrayan, «al mantenimiento de sus estructuras» y no a la voluntad de atentar. Respecto de la violencia callejera, la CIV asegura que esos sucesos «no tienen que ver» con ETA ni cuentan con «una dirección política».
El «honrado» Jesús Loza
La comisión, que se ha fijado como objetivo desplazarse a Euskadi cada tres meses, ha querido incidir en este último viaje en los «aspectos positivos» de los últimos meses. En un encuentro con periodistas celebrado ayer por la tarde, citó en este sentido al Plan Integral de Reinserción de Presos anunciado por el Gobierno de Rajoy y que rebaja algo el listón de requisitos para que los reclusos etarras opten al acercamiento a cárceles vascas.
Creen que ese plan es un gesto del Ejecutivo que, aunque pueda ser calificado de insuficiente por la izquierda abertzale, al menos supone un movimiento «hacia adelante». También citaron como un paso en la dirección correcta el nombramiento de Jesús Loza como comisionado para la convivencia y describieron al político socialista como «honrado y decente».
EL CORREO, 5/5/12