«Mal empezamos si permites que te digan por dónde puedes entrar o salir»

La portavoz de Ciudadanos en el Ayuntamiento de Madrid se convirtió en una de las protagonistas al término de la sesión de investidura de Mariano Rajoy cuando a su salida fue abucheada junto a otros diputados de su partido por los cientos de manifestantes concentrados alrededor de la Cámara Baja a la altura de la calle Cedaceros bajo la bandera de ‘Rodea el Congreso’. A Begoña Villacís (Madrid, 1977) le llamaron «puta», le lanzaron latas de cerveza y monedas con poca puntería, pero que consiguieron despertar la mayor de las indignaciones.

Pregunta (P): ¿Qué se le pasa por la cabeza cuando dicen que fue una provocación salir por la puerta de la Calle Cedaceros sabiendo que los manifestantes se agolpaban en esa zona?
Respuesta (R): Lo primero que se me pasa es que los que lo publicaron ya nos han pedido disculpas por eso y lo han corregido. Desde luego, pensar que es una provocación salir por donde te han votado para que entres es un error. Si permites que haya gente que te diga por dónde tienes que pasar y por dónde no, por dónde entrar o salir, mal empezamos. De hecho, la decisión la tomamos a conciencia. Sabíamos lo que nos íbamos a encontrar, pero no les vamos a dejar ganar esa batalla y, sobre todo, queríamos que se visibilizase lo que es entrar por ahí con muchas ganas de trabajar y salir por el mismo sitio expuesto a la intolerancia y a la violencia.

P: ¿Le dio más miedo o rabia?
R: Yo ya había pasado por eso en el Ayuntamiento. Aquella vez me dio muchísima tristeza y rabia. Pensé «pero bueno, ¿quiénes pensáis que sois vosotros y cómo me juzgáis de esta manera?». Me pareció muy injusto. Pero esta vez, ninguna. Iba acompañada de mis compañeros y la Policía estaba ahí. No sentí miedo pero me topé con la mayor de las intolerancias y con todo lo que no quiero para este país. Cuando empezaron a caer objetos pensé «se están pasando».

P: ¿Se acostumbra una a que le puedan insultar por la calle?
R: Nunca nos podemos acostumbrar a eso. El día que nos inmunicemos estaremos perdidos como sociedad. Lo que está empezando a ocurrir, como he escrito alguna vez en mi columna de El Confidencial, es que poco a poco vemos aceptable lo que no lo es. El acoso igual que es inaceptable en el colegio para nuestros hijos o en cualquier trabajo, tiene que serlo en el entorno político. El respeto y la libertad tienen que estar muy por encima de todas estas cosas.

P: ¿Ha recibido llamadas o mensajes de compañeros de otros grupos del Ayuntamiento de Madrid?
R: No. Todavía no.

· «No he recibido llamadas de otros grupos del Ayuntamiento. Lo achaco a que estamos todos muy centrados en nuestro trabajo»

P: ¿Y le ha sorprendido?
R: Bueno, sí… Pero lo atribuyo a que todos estamos centrados en nuestro trabajo. También es puente.

P: ¿Qué les dijo Albert Rivera?
R: Nos dio su apoyo y se sintió orgulloso por haber optado por la decisión correcta que era salir por la puerta de siempre.

P: ¿Qué piensa de que dirigentes de Unidos Podemos como Alberto Garzón adviertieran incluso al Rey que la legislatura traerá consigo movilización en la calle al alza?
R: Pues que uno acepta la democracia o no la acepta. Hay gente que digiere muy mal los resultados y va a buscar adecuarlos a lo que piensan. Los dirigentes que hablan de esas cosas… En fin, yo creo que antes que no estaban en el Congreso podía tener su lógica, pero ahora están dentro y tienen que cumplir las reglas del juego y aceptar la democracia.

P: Los organizadores de la manifestación e incluso algunos diputados cuestionaron la legitimidad de la investidura de Rajoy. ¿Qué ocurrirá si de ahora en adelante siguen pensando que es un Gobierno ilegítimo?
R: Eso de decir «la democracia soy yo» es algo muy peligroso y ocurre en otros países. En España la legitimidad la dan las urnas, lo quieran ver como lo quieran ver. Empezar a tontear con el término legitimidad y hacer varias lecturas no tiene cabida. Los votos son los votos y hay que aceptarlos.

P: La sesión de investidura nos dejó varias escenas de agresividad en el Hemiciclo, gritos e incluso algún insulto. ¿Cree que será la tónica dominante?
R: Yo espero que no lo sea. Los distintos líderes acabarán siendo conscientes de que tienen algo más que aportar a la política que circo. Si tienes la valiosísima oportunidad de estar en el Congreso para proponer, debatir, legislar… no merece la pena gastarla en hacer un circo político y es una irresponsabilidad. No nos han votado para eso y debemos representar el tipo de país en el que creemos y en el que queremos vivir.

· «Eso de decir la democracia soy yo es algo muy peligroso. Empezar a tontear con el término legitimidad y hacer varias lecturas no tiene cabida»

P: Ciudadanos fue uno de los objetivos de Unidos Podemos y Esquerra Republicana de Catalunya. «Maese cuñado Rivera, «los cínicos naranjas y su escisión Foroches», dijo Gabriel Rufián.
R: Son frases de un faltón. No se puede decir nada, hablamos de un partido que pacta con los del tres por ciento, con el partido que más ha recortado en políticas sociales, el de las sedes embargadas… Está tan poco autorizado para hablar de Ciudadanos y de nada. En fin, merece los comentarios justos.

P: ¿Qué papel jugará el partido al que pertenece en la legislatura? Porque el PP los necesita, pero no son decisivos.
R: Va a ser un papel fundamental, obligatorio. Si Ciudadanos no hubiese cambiado sus posiciones hoy no tendríamos Gobierno. Ciudadanos va a conseguir que éste sea un Gobierno posibilista. Si no hubiese un partido de centro, capaz de dialogar con izquierdas y derechas, flexible, capaz de entender y acercar ideas… estaríamos abocados a una legislatura que no es lo que España necesita. Si queremos estabilidad es fundamental que Ciudadanos ocupe su lugar de centro y lo ejerza.