EL MUNDO 14/09/13
· Drombovskis defendió el referéndum y aseguró que reconocería oficialmente a Cataluña.
Pocas horas tardó ayer el Gobierno en reaccionar a las palabras del primer ministro de Letonia, Valdis Dombrovskis, quien se mostró favorable a una hipotética independencia de Cataluña. «¿Por qué no?», respondió a la posibilidad de reconocer oficialmente a Cataluña tras la celebración de un referéndum. Ante esa declaración de intenciones, el ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación, José Manuel García-Margallo, movió ficha enseguida y anunció una reunión para el lunes con el embajador letón para trasladarle una protesta formal por estas declaraciones.
Margallo, que el día después de la cadena independentista propuso modificar las «competencias y la financiación» de Cataluña para no hacer caso omiso a lo ocurrido durante la Diada, se mostró ayer mucho más tajante y citó para el lunes al embajador letón a una reunión a la que también asistirá el secretario de Estado para la UE, Íñigo Méndez de Vigo, según fuentes diplomáticas consultadas por Europa Press.
El ministro de Exteriores transmitirá su protesta al embajador letón por las declaraciones del primer ministro y le pedirá explicaciones sobre el contexto y las razones por las que Valdis Dombrovskis reaccionó de este modo al valorar la Vía Catalana. Por su parte, el jefe de la diplomacia española también aprovechará el encuentro para recordar al representante diplomático de Letonia (país miembro de la UE) la normativa europea sobre la entrada de nuevos estados en el bloque comunitario y el marco constitucional que existe en España.
De hecho, Margallo fue uno de los primeros y más explícitos en alzar la voz tras la deriva soberanista emprendida por el Govern justo después de la Diada del año pasado. «El adéu a España es el adéu a la Unión Europea», resumió horas antes de la cadena independentista.
«Si hay una clara voluntad del pueblo y una clara demanda por el referéndum, vale absolutamente la pena prestar atención y mirar las opciones sobre cómo abordarlo», dijo el primer ministro letón. Aseguró que el mensaje de la Diada fue «muy poderoso» y lo equiparó al que emitió la Vía Báltica, en 1989, que precedió a la independencia de su país. También se mostró dispuesto a reconocer a una hipotética Cataluña independientes. Estas fueron las declaraciones que levantaron ampollas en el seno del Gobierno.
Curiosamente, había sido el propio titular de Exteriores el que el jueves abogó por el diálogo y pidió hacer una «reflexión» sobre la organización territorial de España, así como «convencer» a los catalanes que quieren la secesión de que la comunidad está mejor dentro que fuera de España.
Los ecos de la cadena independentista también han llegado al mismísimo Parlamento británico, donde se ha presentado una propuesta – que secundan, de momento, sólo 12 diputados– para aprobar una moción en defensa de la Vía Catalana. ERC, que impulsó la medida en una visita a Londres del diputado en el Congreso Alfred Bosch, se jactó ayer por la tarde de haber logrado una declaración oficial de Westminster, aunque acabó rectificando y admitiendo que aún no se ha votado. El texto destaca los métodos democráticos del independentismo catalán y el «espíritu pacífico» vivido durante la Diada.
EL MUNDO 14/09/13